Siempre directa y sin pelos en la lengua. De esta manera es como se muestra nada más y nada menos que Juana Repetto, la hija de Reina Reech y Nicolás Repetto, quien fue noticia por lo que contó en sus redes sociales.
Sucede que delante de sus seguidores, habló de la enfermedad que enfrentó y por la que tuvo que ser intervenida. “Poniéndolos en contexto a quienes no sepan, el HPV, virus de papiloma humano, es una enfermedad de transmisión sexual que padecemos el 80% de la población sexualmente activa. Es mucho más frecuente en mujeres, pero también la pueden padecer los hombres. En mi caso, HPV positivo, lesión en el útero, cirugía. Consulten a sus médicos, no tomen esto más que una experiencia personal con la visión de mis ginecólogos”, comenzó diciendo en su cuenta de Instagram.
«Es un virus que, como viene, podría irse solo. Entonces mi médico me repitió el PAP a los seis meses. Cuando persistió durante dos, tres PAPS, me dijo ‘hay una lesión en el útero, por este HPV, que solo no se está yendo, hay que operar’. Pánico, anestesia general», sostuvo la actriz.
Inmediatamente, Juana Repetto decidió ir por más. «Es una cirugía relativamente sencilla pero al final se complicó un poco, me tuvieron que sacar un pedazo de útero bastante grande, la recuperación no fue tan fácil. La vacuna previene no sólo la reincidencia sino las otras sepas», explicó.
«Si yo esto me lo dejaba estar, podía terminar en algo grave. Dicho esto, a mí me empezó a dar el pap con Sil de grado bajo, en ese caso mi ginecólogo (consulten a los suyos siempre) me dijo que podría irse solo y mientras fuera de grado bajo podíamos ver se se iba solo. Hacer un pap cada 6 meses de control en lugar de uno por año, al tercer pap aún que seguía siendo de grado bajo, deciden hacer la cirugía ya que además tenía una lesión en el útero», explicó.
«Me hicieron la cirugía, salió todo bien, quedaron los bordes libres del virus. El doc me dice que me de la vacuna si o si, que en mi caso es fundamental no solo por que previene la reincidencia del virus, si no que me cubre y reduce mucho los riesgos del resto de las cepas. Entre que tenía entendido que era hasta los 21 años y que no soy muy fan de meterme nada en el cuerpo… Venía pateando la situación. Siempre me sigo chequeando cada 6 meses desde la cirugía. Gracias a la vida me siguen dando perfecto cada vez que me los hago pero no me atrevía a la vacuna. Después de casi 3 años me la di», sentenció Juana.