El próximo jueves 6 de febrero, el ministro de Economía, Luis Caputo, se reunirá con los representantes de la Mesa de Enlace agropecuaria, días después de su regreso al país tras participar en la gira presidencial por Estados Unidos y el Foro Económico Mundial en Davos. El encuentro, solicitado recientemente por las entidades del sector, busca abordar la necesidad de un alivio fiscal inmediato, particularmente en relación con las retenciones aplicadas a las exportaciones, que representan una carga significativa para el sector en un contexto de rentabilidad baja debido a la caída de los precios internacionales y la inflación local.
Desde el Ministerio de Economía, Caputo ha señalado que para avanzar hacia una disminución sustancial de los impuestos se requeriría un aumento en la recaudación equivalente a más de un punto del PBI en 2025, sustentado por un crecimiento económico del 5%. Sin embargo, las entidades agropecuarias consideran crítica la situación actual, especialmente para los productores que operan en un entorno de precios deprimidos y alta presión tributaria. Según un informe de la Fundación Mediterránea, los derechos de exportación representaron entre el 1% y el 1,1% del PBI en 2024, pero esta cifra podría aumentar si no se toman medidas para aliviar la carga fiscal.
La posición de la Mesa de Enlace y sus propuestas
Los dirigentes agropecuarios plantean una serie de demandas clave para mejorar la competitividad del sector y aliviar las tensiones financieras. Entre sus principales pedidos, se encuentra la eliminación de los derechos de exportación, que consideran un factor que socava la competitividad de los productos argentinos en el mercado internacional. También solicitan un esquema impositivo más equilibrado que contemple las particularidades de las economías regionales, buscando reducir la carga fiscal que recae especialmente sobre pequeños y medianos productores.
Otro punto destacado es la implementación de medidas de financiamiento accesible para facilitar inversiones estratégicas. Además, las entidades han subrayado la urgencia de mejorar la infraestructura vial y logística, dado que el mal estado de los caminos rurales y accesos afecta el traslado de insumos y productos, así como la eficiencia de las exportaciones. Proponen avanzar en proyectos relacionados con la hidrovía, los puertos y el ferrocarril para garantizar una logística más competitiva.
La conectividad rural es otra de las preocupaciones centrales. La falta de acceso a internet de calidad en muchas áreas rurales no solo afecta la productividad, sino también la educación en las comunidades del campo. Los representantes de la Mesa de Enlace sugirieron promover inversiones en infraestructura digital para solucionar este problema. Finalmente, los dirigentes manifestaron su inquietud por el aumento de la inseguridad en zonas rurales. Robos de maquinaria, insumos y ganado se han vuelto recurrentes, por lo que solicitan medidas inmediatas para proteger a los productores y sus familias.
El impacto económico de las retenciones y el contexto internacional
La caída de los precios internacionales ha profundizado la crisis para el sector agropecuario. Según la Fundación Mediterránea, el precio de la soja en el mercado internacional promedió USD 361 la tonelada en diciembre de 2024, marcando una caída del 27% respecto al promedio histórico. En el mercado local, el poder adquisitivo del grano disminuyó en un 30%, mientras que la carga tributaria total para el sector se estima en un 64% de la renta agrícola en la zona núcleo y en un 74% en las áreas extrapampeanas.
