No hay dudas de que Sol Pérez es uno de los personajes más destacados del mundo del espectáculo, y es que además de ser una incansable trabajadora, es sumamente querida por la gente. La panelista de El Debate de Gran Hermano es muy cercana a su público, y nunca duda a la hora de dar detalles íntimos de su vida personal.
Ahora que se encuentra embarazada, Sol Pérez siempre es noticia. En uno de los momentos más emocionantes de su vida, la modelo contó el fuerte malestar que atraviesa. «Pasaba por acá para mostrarles cómo estaba Marco, me estoy poniendo mucha crema. Ayer tuve una noche fatal porque decidió que la noche no es para dormir», comentó.
«Se montó una fiestita aparentemente dentro de mi panza hasta las 6 de la mañana. Los calambres que me agarran a la mañana son tremendos. A las tres o cuatro de la mañana grito directamente porque no aguanto el dolor, es un calambre a otro nivel, es inexplicable el dolor. El calor, de repente estoy bien y de repente me agarra ira, mi marido me da ira a veces. Ahora estoy en una etapa que quiero que Guido esté todo el tiempo pegado a mí”, contó.
Sol Pérez abrió su corazón
En una reciente entrevista Sol Pérez se animó a contar cómo fue la búsqueda del bebé: “Yo todos los meses iba y compraba el test por las dudas. La esperanza nunca se me iba. En ese momento tenía muchas peleas con Guido, porque el hombre como que no entiende la carga que le pone la mujer. Guido no entendía la carga que yo le estaba poniendo”, contó.
“Para mí, era un problema mío. O sea, era el yo ‘no poder’. Entonces le dije a Guido, ‘dejá de reírte’. Porque Guido se toma todo con humor. O sale de situaciones pesadas con humor. En ese momento, él me dijo ‘no te podés hacer todos los meses. Si no pasó nada, este mes casi que ni nos vimos’. Y le dije ‘bueno, pero yo siento que estoy’», continuó.
«Y ahí le dije ‘mirá Gui, para mí es re importante. Y cada vez que me da negativo es como que se me cae el mundo. Entro en una situación espantosa. Mi cabeza empieza a echarme culpas. Necesito que me acompañes. Por más que sepas que me va a dar negativo, entrá conmigo o quedate esperando’”, manifestó Sol Pérez.
Sobre su presente, agregó: «Guido es lo máximo, muy compañero. Aunque debo confesar que a veces me aprovechaba un poquito, le decía que tenía sed para que me trajera agua, ¡y yo estaba perfecta! Estos tres meses fueron muy distintos. El primer mes estaba entrenando a full, comía como siempre, ni me había dado cuenta que estaba embarazada. Pero cuando lo supe, hice un stop total: de todo a cero».
