La ola de calor en Argentina volvió y se esperan temperaturas por encima de los 32°C en estos días. Sin embargo, dependiendo de la zona geográfica puede variar el clima, lo que genera que haya zonas más calurosas. Ante esto, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) puso en alerta al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y a otras siete provincias.
De esta manera, se mantiene el alerta amarillo que regía para algunas partes del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y zonas de Entre Ríos, Corrientes, Formosa, Chaco, Córdoba, Santa Fe y San Luis. Esta alerta establece un efecto leve a moderado en la salud, de acuerdo al sistema del SMN, por lo que estas temperaturas pueden ser peligrosas para los grupos de riesgo, como niños y niñas, personas mayores de 65 años, con enfermedades crónicas.
En las últimas horas, este tipo de alertas creció y ponen en aviso a Ushuaia, Mendoza y La Pampa que si la ola de calor no cesa, también podrían elevarse al amarillo. Por el momento, no hay provincias en alerta naranja ni roja, las dos más peligrosas para la salud, tanto para grupos de riesgo como personas que no pertenecen a este sector.
Para los próximos días, se estima que las temperaturas disminuirán y que desde el jueves por la tarde podrían ir levantándose las alertas. De hecho, para el viernes en AMBA podría haber chaparrones, lo que haría descender abruptamente la ola de calor y ya no habría riesgos. Sin embargo, para el fin de semana podría haber un repunte de las temperaturas, aunque no de manera tan elevada.
Recomendaciones para la ola de calor
El SMN lanzó una serie de recomendaciones ante las temperaturas extremas en el país. Principalmente, señalan la necesidad de consumir agua sin esperar a tener sed para mantener una hidratación adecuada, no exponerse al sol en exceso en los horarios centrales del día (de 10 a 16), evitar las bebidas alcohólicas o muy azucaradas, evitar comer en abundancia y prestar atención a personas del grupo de riesgo (bebés, niños, niñas y personas mayores).
También recomiendan ingerir frutas y verduras, reducir la actividad física y usar ropa ligera con colores claros. Desde el SMN aclaran que si se siguen estas recomendaciones no es que una persona no sentirá la temperatura extrema, sino que así se evitarán los golpes de calor o serán menos graves.