La jueza federal y ex esposa del fiscal Alberto Nisman, Sandra Arroyo Salgado, habló sobre la causa a 10 años de su fallecimiento. Bajo ese marco, insistió en que la muerte fue un asesinato y recordó que tras el episodio se intentó «ensuciar la imagen» del funcionario judicial. En ese sentido, sentenció: «Sabían que para silenciarlo tenían que matarlo». Además, apuntó contra del Gobierno de Cristina Kirchner.
De acuerdo a Noticias Argentinas, la magistrada recordó el suceso: «Trataron de ensuciar la imagen de su papá con incluso muchas mentiras. Recuerdo que empapelaron la Ciudad con afiches con una foto que él nunca se hubiera tomado. Un colega me dijo que eso era un fotomontaje, él nunca usaba remera con camisa leñadora arriba. Ese no era el cuerpo de Alberto».
En ese sentido, en diálogo con LN+ Arroyo Salgado sostuvo: «La verdad ya se sabe: Nisman fue víctima de un homicidio». De esa manera, remarcó: «Está probado científica y judicialmente con pruebas desde 2018 y está probado que su asesinato está vinculado a su función en la investigación sobre el atentado terrorista a la AMIA».
Al mismo tiempo, la jueza señaló que se encontraron cosas en el departamento de Puerto Madero de Nisman que no correspondían con su personalidad. Allí, explicó: «Cuando vi la foto de su dormitorio me di cuenta de que Nisman no había llegado a acostarse el sábado a la noche porque él no abría la cama tal como estaba abierta en esa escena del crimen. Cambiaron sus contraseñas también».
Al hablar de ese momento, consideró que «el 2015 fue un año de mucha maldad y miedo». Además, apuntó contra el gobierno de Cristina Kirchner: «Miren lo que le puede pasar al que se anima a enfrentarse al poder vigente». Bajo ese marco, Arroyo Salgado enfatizó: «Gracias al trabajo de Nisman, nuestro país no terminó alineado con países vinculados al terrorismo». Finalmente, concluyó: «Él puso al descubierto cómo los argentinos queremos vivir. Por eso es tan importante defender a la Argentina de estas políticas».
La palabra de las hijas de Alberto Nisman
A diez años de la muerte del fiscal Alberto Nisman, encontrado sin vida en las torres Le Parc de Puerto Madero el 18 de enero de 2015, sus hijas Iara (25) y Kala (18) rompieron el silencio y hablaron públicamente sobre el caso por primera vez. Ambas coincidieron en que la familia nunca dudó de que se tratara de un asesinato, aunque reconocieron que no sienten la necesidad de conocer quién fue el responsable.
“Nunca nadie de nuestra familia dudó que haya sido otra cosa”, señalaron las hermanas en una entrevista con Diego Leuco en Resumido, una sección del canal de streaming Luzu TV. A lo largo del diálogo, recordaron cómo vivieron los días previos y posteriores al hallazgo del cuerpo de su padre, así como el impacto emocional que les dejó el suceso.