El presidente Javier Milei viajará la próxima semana a Washington para reunirse con Donald Trump, en un nuevo intento por fortalecer la relación bilateral y avanzar en un tratado de libre comercio con Estados Unidos. La visita se da en un contexto de incertidumbre económica y tensiones comerciales tras la reciente decisión del republicano de imponer un arancel del 25% al acero y aluminio, lo que afecta directamente a las exportaciones argentinas.
La reunión entre Milei y Trump ha sido anticipada como un paso central en la estrategia diplomática del Gobierno argentino. Desde su asunción, el mandatario libertario ha mostrado una alineación ideológica con el expresidente estadounidense, apostando a profundizar la relación bilateral en términos comerciales y estratégicos.
El principal objetivo del encuentro será avanzar en un tratado de libre comercio que permita mejorar el acceso de productos argentinos al mercado estadounidense. Según fuentes cercanas al Ejecutivo, la intención de Milei es consolidar a la Argentina como un socio confiable de Washington, en un contexto donde su administración busca atraer inversiones extranjeras y fortalecer la competitividad de la industria local.
El viaje está programado para el miércoles próximo y Milei viajará acompañado por su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei. En Washington se sumará el canciller Gerardo Werthein, quien tendrá un rol clave en las negociaciones.
Las expectativas sobre un acuerdo comercial
Desde la Casa Rosada, consideran que un tratado de libre comercio con Estados Unidos representaría un avance significativo para la inserción de Argentina en el comercio global. El ministro de Economía, Luis Caputo, ha señalado en varias oportunidades que el país necesita abrir nuevos mercados para sus productos, y un acuerdo de este tipo podría aliviar las restricciones que enfrentan las exportaciones argentinas en mercados clave.
Fuentes oficiales destacan que la reunión entre Milei y Trump servirá para reforzar la confianza mutua y plantear los beneficios de una mayor integración comercial. Sin embargo, advierten que las negociaciones podrían ser complejas, ya que Estados Unidos mantiene una postura proteccionista en sectores sensibles como la industria manufacturera y la producción agrícola.
El impacto de los nuevos aranceles en la relación bilateral
El encuentro entre los mandatarios también se da en un contexto de tensión comercial, luego de que Trump anunciara un aumento del 25% en los aranceles al acero y aluminio importados, lo que impacta directamente en la economía argentina.
Las empresas más afectadas por esta medida son Aluar, que en 2024 exportó a Estados Unidos aluminio por 515 millones de dólares, y Tenaris, que sumó ventas por 112 millones. Según datos del INDEC, Argentina cerró 2024 con un superávit de 229 millones de dólares en su intercambio comercial con Estados Unidos, exportando bienes por 6.454 millones de dólares e importando por 6.225 millones.
El Gobierno argentino confía en que la relación personal entre Milei y Trump podría ayudar a revertir esta situación. «Lo de los aranceles lo arreglamos por la otra ventana», indicaron fuentes cercanas al Ejecutivo, sugiriendo que un tratado de libre comercio podría servir como vía para eliminar las barreras impuestas recientemente por la administración estadounidense.
En este marco, la próxima reunión en Washington será determinante para el futuro de la relación bilateral y la posibilidad de un acuerdo comercial que beneficie a la Argentina en un contexto de transformación económica.