La aerolínea low cost Flybondi presentará una demanda contra la provincia de Buenos Aires para solicitar la nulidad de la multa impuesta por $300 millones, debido a supuestas infracciones vinculadas con la cancelación y reprogramación de vuelos. La compañía sostiene que la sanción es ilegítima y busca revertir la medida, argumentando que excede las competencias del gobierno bonaerense y que el proceso administrativo estuvo viciado de arbitrariedad.
Desde la aerolínea explicaron que para poder iniciar la demanda se vieron obligados a pagar la multa, algo que consideran contrario al principio de inocencia, ya que la sanción se ejecutó antes de que exista una sentencia firme. “Exigir el pago de una multa inusitada y desproporcionada afecta garantías constitucionales, como el derecho a la defensa en juicio”, indicaron desde la empresa.
En su presentación judicial, Flybondi sostiene que la Dirección Provincial de Defensa de los Consumidores y Usuarios no tiene competencia en cuestiones aeronáuticas. Incluso, la Corte Suprema de Justicia de la Nación y el Poder Judicial bonaerense se manifestaron en este sentido en fallos recientes. Argumentan además que la industria aeronáutica está regulada por el Código Aeronáutico y su fiscalización es responsabilidad de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC). En esa línea, señalaron que la Dirección Provincial desconoció la legislación vigente, aplicando criterios que no corresponden a la normativa nacional.
La aerolínea low cost pide ser absuelta de las infracciones que le imputan y considera que la sanción provincial se excede en su jurisdicción.
La multa del gobierno bonaerense
A finales de enero, el gobierno de Axel Kicillof impuso a Flybondi una multa de $300 millones, argumentando que la sanción se basó en 2.400 denuncias de pasajeros. Desde el Ministerio de Producción de la provincia, encabezado por Augusto Costa, justificaron la medida señalando que la empresa incurrió en reiteradas cancelaciones y reprogramaciones de vuelos, lo que generó perjuicios a los usuarios.
Según el comunicado oficial, las infracciones de Flybondi incluyen cancelaciones y reprogramaciones sin previo aviso, dificultades para comunicarse con la empresa y gestionar reclamos, problemas con reintegros y compensaciones a pasajeros afectados, y la falta de publicación de las condiciones generales y particulares de contratación en su sitio web, lo que infringe la Ley Nacional de Defensa del Consumidor.
Frente a esto, Flybondi ya había presentado un recurso administrativo ante la provincia para apelar la multa, pero ahora avanza con una acción judicial para anular la sanción.
La mirada del Gobierno nacional y los problemas operativos
Más allá de la sanción provincial, el desempeño de Flybondi también está bajo la lupa del gobierno nacional. En diciembre, la Secretaría de Transporte de la Nación intimó a la aerolínea a presentar un plan correctivo para reducir la cantidad de cancelaciones y garantizar la seguridad operativa.
“La medida surge tras el elevado número de cancelaciones y reprogramaciones, lo que afecta directamente a los usuarios”, indicaron desde la cartera de Transporte, y remarcaron que no se permitirá que Flybondi continúe operando con este nivel de irregularidades.
En los últimos meses, la compañía también enfrentó problemas con sus talleres de mantenimiento, lo que llevó a la clausura temporal de sus instalaciones y a la tercerización de reparaciones. Aunque estas áreas fueron rehabilitadas recientemente, el gobierno sigue monitoreando el desempeño operacional de la aerolínea.
“La intención no es multarla o sancionarla, sino que mejore su servicio”, aseguraron fuentes oficiales. “Se están viendo algunos avances, como la reducción de rutas para mejorar la eficiencia de su flota, pero seguimos en constante diálogo con la empresa”.
Líder en impuntualidad y cancelaciones
Según un informe de la consultora Adventus, la puntualidad promedio de Flybondi en enero fue de 50,6%, pero en febrero cayó a 30,6%, posicionándose como la aerolínea más impuntual del país. Además, encabezó el ranking de cancelaciones, con un 74% de vuelos suspendidos.