La demanda de vinos sin alcohol, también llamados vinos desalcoholizados, va en aumento. Las proyecciones sugieren un incremento sustancial de las ventas en este sector para los años venideros. Profundizando en los datos del mercado, es posible explorar las tendencias de crecimiento e identificar oportunidades auspiciosas para productores y distribuidores en el mercado del vino sin alcohol. En particular, se prevé que el mercado de vinos sin alcohol se expanda hasta 2033, con una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) del 10%. Un estudio reciente al respecto develó que el valor de mercado actual de dos mil millones de dólares está a punto de ascender a 5,2 mil millones de dólares dentro de este período de tiempo.
Durante el año pasado, el mercado mundial de vinos espumantes sin alcohol y de vinos secos experimentó incrementos notables, con subidas del 7% y el 6%, respectivamente, respecto al año anterior. Las previsiones indican una tasa de crecimiento anual del 11% en el consumo durante los próximos diez años, superando a los vinos con bajo contenido de alcohol en favor de las opciones sin alcohol.
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Los analistas también notan una tendencia creciente de productos premium sin alcohol, que atraen a los consumidores que valoran la calidad y están dispuestos a pagar más, especialmente cuando estos productos cumplen con sus expectativas de sabor y calidad. Por su parte, los llamados millennials, la generación de nacidos entre principios de los ochenta y mediados de los noventa, están impulsando la demanda de vinos y licores sin alcohol, buscando opciones de bebidas innovadoras y de alta calidad. Sin embargo, otros grupos demográficos de consumidores también muestran interés en los vinos desalcoholizados, lo cual indica un atractivo cada vez mayor en el mercado.
El ascenso de las bebidas sin alcohol
El auge de las bebidas no alcohólicas está transformando la forma en que la gente bebe y socializa. Con una mayor conciencia sobre los efectos negativos del exceso de alcohol en la salud, más personas optan por alternativas sin alcohol que ofrecen el mismo sabor y experiencia sin las consecuencias como la resaca. En particular, los vinos sin alcohol están ganando popularidad. Estas bebidas permiten a las personas disfrutar de los ricos sabores y aromas del vino tradicional sin contenido de alcohol.
Los enólogos están atendiendo a esta demanda mediante la creación de vinos desalcoholizados de alta calidad que son virtualmente indistinguibles de sus homólogos clásicos. Estos vinos se elaboran con el mismo cuidado y atención al detalle que los vinos tradicionales, lo que garantiza que brinden una experiencia satisfactoria y placentera. A medida que más personas buscan opciones de bebidas más saludables y conscientes, el mercado de vinos sin alcohol continúa expandiéndose, ofreciendo una amplia gama de opciones para cada paladar.
Algunos métodos de desalcoholización
Un aspecto interesante a tener en cuenta es que cuando una bebida dice «sin alcohol» en la etiqueta, es posible que todavía contenga un poco de alcohol. La mayoría de los lugares permiten que estas bebidas tengan hasta un 0,5% de alcohol, lo cual representa una cantidad realmente pequeña. Este resto de alcohol puede permanecer en la bebida por la forma en que se elabora o por la forma en que se extrae el alcohol. El vino tradicional suele tener entre un ocho y un 15 por ciento de alcohol, lo que es significativo, mientras que el vino sin alcohol tiene menos del 0,5%.
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Para elaborar vinos sin alcohol se lleva a cabo un proceso conocido como desalcoholización. Concretamente, se trata de distintas técnicas que remueven el alcohol. En primer lugar, el vino se elabora con el mismo jugo de frutas que se utiliza en los vinos a base de alcohol. Luego, se toman más medidas para extraer el alcohol con el objetivo de preservar todos los maravillosos sabores. Uno de los principales métodos es el conocido como osmosis invertida. Consiste en un proceso basado en filtración que elimina selectivamente el alcohol manteniendo los sabores y las estructuras esenciales del vino. En términos sencillos es algo así como un filtro súper pequeño que solo deja pasar el alcohol y el agua, pero mantiene todas las demás virtudes del vino, como el color, el sabor y el olor.