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POLÍTICA

Mauricio Macri se opuso al nombramiento de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla en la Corte Suprema

El expresidente rechazó la designación y advirtió sobre el impacto institucional.

Mauricio Macri
Macri expresó su desacuerdo con la estrategia del Gobierno y recordó que la confianza en la Justicia y las instituciones es clave para la estabilidad democrática.

El expresidente Mauricio Macri criticó la decisión del mandatario Javier Milei de designar por decreto a Ariel Lijo y Manuel García Mansilla para la Corte Suprema de Justicia. A través de su cuenta de X, aseguró que la medida «no es correcta» y que los jueces de los máximos tribunales no deberían generar «tanto rechazo».

La postura de Macri sobre la Corte

Mauricio Macri expresó su desacuerdo con la estrategia del Gobierno y recordó que la confianza en la Justicia y las instituciones es clave para la estabilidad democrática. «Ratifico mi posición de que los jueces que ocupen los cargos más altos del Poder Judicial no pueden ser objeto de tanto rechazo», publicó en redes sociales.

El líder del PRO también mencionó que su postura es mayoritaria dentro de su partido y que quedó reflejada en un informe de la Fundación Pensar. Además, enfatizó la necesidad de transparencia en la designación de magistrados para evitar controversias.

Reunión del PRO y estrategia política

Horas antes de su publicación en redes, Macri encabezó una reunión en la sede del PRO en la calle Balcarce, en la Ciudad de Buenos Aires. El encuentro tuvo como objetivo delinear un frente electoral bonaerense sin la inclusión de La Libertad Avanza (LLA), marcando distancia con el gobierno de Milei.

A la reunión asistieron dirigentes como Diego Santilli, Cristian Ritondo, el jefe de Gobierno porteño Jorge Macri y la intendenta de Vicente López, Soledad Martínez. Sin embargo, hubo ausencias notables, como la de los gobernadores Ignacio Torres (Chubut), Rogelio Frigerio (Entre Ríos) y la diputada nacional María Eugenia Vidal.

Un escenario de tensión política

La decisión de Javier Milei de avanzar con el nombramiento de Lijo y García Mansilla sin acuerdo del Senado ha generado fuerte debate en el ámbito político. Mientras el oficialismo defiende la necesidad de completar las vacantes en la Corte Suprema, sectores de la oposición cuestionan la legalidad del procedimiento.

Mauricio Macri, quien en su presidencia también designó jueces por decreto, ahora se distancia de esa estrategia. Sus declaraciones refuerzan las tensiones entre el PRO y el Gobierno, en un contexto donde los reacomodamientos políticos dentro de la oposición continúan en evolución.

El desenlace de esta controversia será clave para definir el equilibrio de poder en la Justicia y las alianzas de cara a futuros desafíos electorales.