El gobierno de Estados Unidos sumó en las últimas horas a la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner a la lista de funcionarios y exmandatarios latinoamericanos que tienen prohibido el ingreso al país, en el marco de su política internacional contra la corrupción y las violaciones a los derechos humanos.
La decisión se basa en la Sección 7031(c) de la Ley de Asignaciones del Congreso estadounidense, que autoriza al Departamento de Estado a restringir visas a personas acusadas de “corrupción significativa” o de haber cometido graves violaciones a los derechos humanos. Estas sanciones no solo afectan a los implicados, sino también a sus familiares directos, quienes tampoco podrán obtener visados para ingresar a Estados Unidos.
Cristina Kirchner, entre los sancionados
La inclusión de la exmandataria argentina se da en el contexto de la condena que recibió en la causa Vialidad, donde fue sentenciada a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Desde Washington, justificaron la medida como parte de un esfuerzo por “fortalecer el Estado de derecho y proteger la democracia” en la región.
Otros líderes regionales en la lista
Cristina Kirchner se suma a un grupo de líderes y exlíderes latinoamericanos de alto perfil que ya habían sido sancionados por Estados Unidos. Entre ellos se encuentran:
- Nicolás Maduro, presidente de Venezuela.
- Daniel Ortega, presidente de Nicaragua.
- Raúl Castro y Miguel Díaz-Canel, expresidente y actual mandatario de Cuba.
- Horacio Cartes, expresidente de Paraguay.
- Juan Orlando Hernández, expresidente de Honduras, detenido en Estados Unidos por causas de narcotráfico.
- Ricardo Martinelli, expresidente de Panamá, condenado por blanqueo de capitales.
- Rafael Correa y Jorge Glas, expresidente y exvicepresidente de Ecuador, ambos condenados por corrupción.
- Julio De Vido, exministro argentino de Planificación, procesado en varias causas judiciales.
Sanciones a funcionarios judiciales y fuerzas de seguridad
La política de sanciones de Estados Unidos también alcanza a magistrados y policías de países como Guatemala, El Salvador y Nicaragua, acusados de manipular causas judiciales, colaborar con pandillas o reprimir a la oposición.
Tensión diplomática en aumento
Las sanciones han generado tensiones diplomáticas entre Washington y los gobiernos involucrados, que en muchos casos las consideran una intromisión en sus asuntos internos. Desde la administración estadounidense, sin embargo, aseguran que estas decisiones forman parte de un compromiso global para luchar contra la corrupción, defender la transparencia y promover valores democráticos en América Latina.
El caso de Cristina Kirchner se suma a una lista que, según fuentes diplomáticas, podría seguir creciendo a medida que avancen investigaciones y condenas en la región.