Jason McAteer, ex futbolista del Liverpool, reveló detalles estremecedores sobre su lucha contra la depresión tras su retiro. En una entrevista para el podcast Tales, Tears and Trophies, emitido en el canal de beIN Sports, el irlandés habló con crudeza sobre uno de los momentos más difíciles de su vida, cuando llegó a considerar el suicidio.
Con una carrera que incluyó 100 partidos con el Liverpool y pasos por equipos como Bolton, Blackburn, Sunderland y Tranmere, además de 52 presencias con la Selección de Irlanda, el ex mediocampista vivió una complicada transición fuera de las canchas. La falta de una estructura y un propósito claro lo sumergieron en una profunda crisis emocional.
Uno de los episodios más impactantes que relató ocurrió mientras manejaba su auto camino a recoger a su hijo. «Podría simplemente girar el auto aquí y acabar con todo. Y estaba peleando conmigo mismo para no hacerlo. Escuchaba en mi cabeza: ‘Hazlo, hazlo, hazlo’, y yo respondía: ‘No, no’. Luchaba con el volante«, confesó. Tras ese momento de angustia, logró sobreponerse y pidió ayuda a su familia.
La falta de estabilidad que sufrió tras dejar el fútbol fue un factor determinante en su estado anímico. «No tenía propósito ni estructura. En televisión trabajaba de forma esporádica, tal vez uno o dos programas por semana. Había días y días sin nada que hacer. Extraño todo sobre jugar. Simplemente salir al campo y estar libre por 90 minutos sin preocupaciones. Es lo mejor«, expresó sobre su experiencia posterior al retiro.
El vacío del retiro y la necesidad de mayor apoyo
A lo largo de su testimonio, McAteer hizo hincapié en la importancia de brindar apoyo a los jugadores que dejan la actividad profesional. «No creo que esto sea algo que las federaciones de fútbol atiendan suficiente, y honestamente necesita ser abordado. El estigma en torno a la salud mental se está rompiendo lentamente, pero la gente no entiende el vacío que queda tras el retiro y cómo puede afectarnos«, afirmó.
El ex mediocampista ya había hablado sobre estos problemas en su autobiografía Blood, Sweat & Jason McAteer, publicada en 2017, pero esta vez insistió en la necesidad de mayor acompañamiento. «La evolución del fútbol no solo debe centrarse en lo deportivo y lo comercial, sino también en la salud mental. Necesitamos más recursos, más apoyo, más orientación para aquellos que terminan su carrera y se encuentran sin dirección«, agregó.
El caso de McAteer refleja una problemática cada vez más frecuente en el deporte de alto rendimiento. Desde la pérdida de identidad hasta la dificultad para adaptarse a una nueva vida, la salud mental de los atletas es un tema que sigue cobrando relevancia. Un ejemplo de ello fue lo que atravesó la gimnasta Simone Biles en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, cuando decidió abandonar la competencia debido a problemas psicológicos que afectaban su desempeño.