Muy fuerte fue lo que se vivió en las últimas horas en Mujeres Argentinas, el programa que lleva adelante Belén Ludueña a través de la pantalla de Canal Trece, donde dialogaron nada más y nada menos que con Luciana Salazar, quien no dudó en hablar de su enfrentamiento con Martín Redrado.
«Me indigna la violencia. Es repudiable desde todo punto de vista porque hay una menor involucrada. Yo me callé mucho tiempo, pero mi reclamo siempre fue público porque soy la voz de mi hija que hoy es menor y no puede hablar», comenzó diciendo sobre Matilda.
«Tengo que salir a explicar cosas que están en la Justicia desde el día 1. Las callaba por respeto, pero cuando se niega a una menor, su historia y su identidad es otra cosa. Más allá de que no sea el padre biológico, que eso siempre quedó claro, cómo ella vino al mundo y sus derechos adquiridos, todo eso fue un proyecto juntos”, manifestó la rubia.
Sin pelos en la lengua y ante la atenta mirada de Belén Ludueña. “Es por alimentos. Antes de que naciera Matilda él firmó y no solo cumplió hasta los tres años sino que ese acuerdo estuvo ejecutado. Él durante mucho tiempo la ocultó y yo lo acepté hasta que me cansé”, expuso.
«En el padre afín no hay ningún acuerdo firmado, esto es más. Lo que pasa con la subrogación es que es tan nueva en el mundo, y más en este país, que está todo poco masticado y es difícil ponerle un rótulo a las cosas”, reveló sin guardarse absolutamente nada.
“En los papeles de la vida privada él es el padre porque tiene obligaciones y tenía un compromiso emocional impuesto por él mismo. En la Justicia tengo audios, mails y pruebas donde pedía la revinculación constante con la nena. Él es deudor y lo voy a llamar así. Me quiso hacer una causa por calumnias e injurias y la negaron”, sentenció.