Una noticia impactante sacudió este fin de semana al fútbol colombiano: Jorge Bolaño, reconocido ex volante central de la Selección Colombia, falleció de manera repentina a los 47 años tras sufrir un infarto mientras asistía a una fiesta en la ciudad de Cúcuta. La noticia generó un profundo pesar en los hinchas y en el ambiente deportivo del país cafetero.
La Federación Colombiana de Fútbol confirmó el deceso a través de un emotivo comunicado, donde expresó su dolor por la pérdida y destacó su trayectoria. “La partida de Jorge Bolaño deja un vacío en el corazón de quienes lo conocieron y admiraron. Su legado como futbolista y formador perdurará en la memoria del deporte colombiano”, señalaron desde la institución.
Bolaño fue una de las figuras destacadas del Junior de Barranquilla en los años 90. Su desempeño en el equipo rojiblanco le valió un lugar en la selección nacional, con la que debutó en 1995 y disputó el Mundial de Francia 1998, dejando huella como uno de los grandes mediocampistas de su generación. También participó en las Eliminatorias a los mundiales de 1998, 2002 y 2006, y en la Copa América 1999, donde convirtió un gol en cuartos de final ante Chile.
Carrera internacional y legado como formador
Su talento traspasó fronteras cuando, en 1999, fue fichado por el Parma de Italia, donde se mantuvo hasta 2007 y ganó la Copa Italia en el año 2002. Durante su etapa en el fútbol italiano también vistió las camisetas de Sampdoria, Lecce y Modena, completando una década en Europa antes de regresar a Colombia.
En 2010, ya de vuelta en su país, se sumó al Cúcuta Deportivo, donde jugó dos temporadas antes de colgar los botines en 2012. Sin alejarse del deporte que lo formó, incursionó como entrenador y formador de juveniles, llegando a ser asistente técnico de la selección sub-17 de Colombia entre 2022 y 2024. También dirigió al Real Frontera de Venezuela y trabajó como comentarista en medios locales.
La repentina partida de Bolaño dejó consternados tanto a los seguidores del Junior como a los hinchas de la selección, que aún recuerdan con cariño sus actuaciones en torneos internacionales. Su vida estuvo siempre ligada al fútbol, tanto en el campo como desde el banquillo, y su figura queda marcada como la de un referente que trascendió generaciones.