El cardenal italiano Giovanni Angelo Becciu anunció que no ingresará al cónclave que elegirá un nuevo Papa a partir del próximo 7 de mayo. Cabe recordar que se trata de una persona que fue vetada por el Papa Francisco luego de que haya sido condenado a cinco años y medio de prisión y a inhabilitación perpetua para ejercer funciones en el Vaticano por una causa histórica para la Iglesia Católica.
«He decidido obedecer la voluntad del Papa Francisco, permaneciendo convencido de mi inocencia«, indicó Becciu en un escrito. Además, sostuvo que tomó esta decisión «por el bien de la Iglesia» y para «contribuir a la comunión y serenidad del cónclave» para eleigr al nuevo líder religioso.
«Teniendo en el corazón el bien de la Iglesia, a la que he servido y seguiré sirviendo con fidelidad y amor, así como contribuir a la comunión y serenidad del Cónclave, he decidido obedecer como siempre he hecho a la voluntad del Papa Francisco de no entrar en el Cónclave permaneciendo convencido de mi inocencia», agregó el cardenal vetado por el Papa Francisco.
Por qué lo vetaron a Becciu de la Iglesia
A los 76 años el cardenal fue condenado a cinco años y medio de prisión y a inhabilitación perpetua para ejercer funciones en el Vaticano. Entre las operaciones bajo la lupa estuvo la compra irregular de un edificio en Londres con fondos del Óbolo de San Pedro, un fondo destinado originalmente a obras de caridad. También se investigó una donación a una ONG dirigida por su hermano, vinculada a la Cáritas de Cerdeña.
El impacto del escándalo no fue sólo judicial sino también institucional, según NA. Becciu, quien había sido uno de los funcionarios más poderosos del Vaticano entre 2011 y 2018, perdió su puesto como prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, un cargo clave en el proceso de canonización.
A raíz de esto, el Papa Francisco lo vetó para evitar incomodidades dentro de la Iglesia Católica, aunque mantenía su derecho a participar del cónclave. Manteniendo la voluntad del pontífice argentino, decidió apartarse de la elección del nuevo papa, aunque asegura que es inocente de las acusaciones contra él.