Las comparaciones en el fútbol siempre generan debate, y más aún cuando vienen de leyendas. En esta ocasión, fue Iker Casillas quien se sumó a un desafío en redes sociales que lo puso a elegir entre los jugadores del Real Madrid campeón de la Champions League 1999/2000 y los que alzaron la Orejona en la última temporada, luego de vencer al Borussia Dortmund en Wembley.
El exarquero comenzó por el arco, donde se eligió a sí mismo en lugar de Thibaut Courtois. Luego, en defensa, optó por nombres clásicos como Míchel Salgado, Iván Helguera, Aitor Karanka y Roberto Carlos, dejando fuera a figuras actuales como Carvajal, Nacho, Rüdiger y Mendy.
La mayor controversia llegó en el mediocampo, cuando prefirió a Iván Campo antes que Camavinga, y a McManaman por encima de Federico Valverde. Sin embargo, lo que realmente encendió las redes fue su decisión de elegir a Fernando Redondo en lugar de Toni Kroos, desplazando al alemán que ha sido clave en la última era dorada del club, pero para Casillas, «fue el mejor de la historia».
Delantera con nostalgia y redes encendidas por las críticas
En la línea ofensiva, Casillas completó su once ideal con Raúl, Anelka y Morientes, dejando fuera a figuras actuales como Vinícius Júnior, Bellingham y Mbappé, a quien incluyó anticipándose a su llegada. Para el campeón del mundo en 2010, el equipo dirigido por Vicente del Bosque superaba en nivel al que hoy entrena Carlo Ancelotti.
Como era de esperarse, la reacción de los hinchas no se hizo esperar. Las redes sociales se llenaron de mensajes cargados de ironía y enojo, cuestionando las elecciones del exguardameta. Algunos comentarios como “Anelka antes que Vini, esta gente no aprobaría ni primaria” o “Pondría a Mendy de arquero antes que a él” se volvieron virales.
Más allá de la polémica, lo cierto es que Casillas tuvo una carrera brillante en el club blanco: ganó cinco Ligas de España, tres Champions, dos Copas del Rey y un Mundial de Clubes, entre otros trofeos. Y con la Selección de España, fue campeón del mundo y bicampeón de Europa. Su opinión pesa, aunque no todos coincidan con ella. El debate entre generaciones, una vez más, quedó abierto.
