Sin lugar a dudas Sergio Lapegüe es uno de los personajes más importantes del mundo del espectáculo, y es que su público lo sigue a dónde sea. Ahora sus televidentes debieron migrar de canal, y es que después de tantos años de ser figura de TN, el periodista apostó por conducir su propio programa en América TV, Lape Club Social.
Fue en su programa donde Sergio Lapegüe dio una triste noticia a sus televidentes, y es que lejos se encuentra de obtener justicia uno de los casos más escalofriantes en lo que va del año. «Hablamos del crimen de Paloma y Josué. Ordenaron liberar al único detenido», reveló el periodista sobre la pareja adolescente que fue asesinada en Florencio Varela.
Fue entonces que Mauro Szeta tomó la palabra: «Esta libertad está ajustada de derechos, no tenían nada contea la única persona detenida en este caso, en este doble crimen. Un papelón judicial a lo largo de esta investigación. No han encontrado un solo rastro, una sola prueba. Recordemos que a Paloma y Josué los matan de una manera brutal en un descampado en Florencio Varela».
«Hubo alguna que otra polémica declaración del papá. Cuando ni siquiera habían hecho la autopsia de su hija dio declaraciones raras, de poco corazón, de poca empatía en su propio programa de streaming. Lo cierto es que a nivel de la causa están en forja cero. Ya sacaron a un fiscal, apartaron a uno y ahora hay otro pero no avanza la causa. Un papelón», sentenció Mauro Szeta.
Conmoción por lo que contó Sergio Lapegüe
Muy fuerte fue lo que se escuchó en el ciclo de Sergio Lapegüe: «Esto arrancó con la decisión de un grupo de jóvenes que suelen parar en un gimnasio en la zona de Pilar. Ellos entendieron que tenían que hacer una suerte de justicia por mano propia cazando violadores. Ahora están en cana, son furor en las redes sociales, tienen un millón y medio de seguidores».
«Ellos arrancan con un mecanismo de limpiar de las calles abusadores. Se metían en redes de citas con una falsa identidad a pescar abusadores de menores. Una de las integrantes de la banda, de 20 años, empezaba a chatear con un caballero en una conversación de adultos. En un momento la chica migraba y le decía ‘tengo 13 años’. Muchos caballeros concertaban una entrevista igual, sabiendo que iban a encontrarse con una menor», contó Mauro Szeta.
«Cuando el hombre llegaba a la cita históricamente lo sometían a una golpiza en una plaza pública o le rompian el auto, el tema es que pasaron a mayores. Pasaron a secuestrar durante tres horas en un departamento a un hombre que había concertado una entrevista con una menor y lo sometieron a torturas. Ellos lo subían a las redes sociales», agregó.
