El presidente Javier Milei volvió a provocar en redes sociales con un mensaje dirigido a sus opositores, en el que celebró la baja de la pobreza al 34,9%, según el Indec, y desafió a quienes critican su gobierno. «Kuka esto no te gustará. La pobreza sigue bajando y se ubica en el 34,9%. No sólo que tenemos un programa exitoso, sino que además es muy inclusivo (tal como dicen Uds. con la gente adentro)», escribió Milei en su cuenta de X.
Fiel a su estilo combativo, Milei no se quedó ahí y lanzó un mensaje directo a quienes cuestionan su plan económico: «Sigan llorando porque a la gente de bien cada día le va mejor abrazando la libertad. Fin».
El mensaje generó una ola de reacciones en redes sociales, con seguidores del mandatario celebrando la baja de la pobreza y opositores cuestionando su tono provocador. Desde sectores afines al peronismo señalaron que la mejora en los indicadores aún no se traduce en un alivio concreto para los sectores más golpeados por la crisis.
La frase «sigan llorando» causó especial revuelo, ya que Milei la utilizó en otras ocasiones para responder a sus detractores, en una estrategia discursiva que refuerza su perfil confrontativo. Su afirmación de que el programa económico es «inclusivo» se leyó como una ironía contra quienes lo acusan de implementar un ajuste sin contemplaciones.
Milei sigue manejando la agenda política y mediática ante cada intervención
El tuit de Milei también fue interpretado como un intento de marcar la agenda y eclipsar las críticas recientes sobre la caída del consumo y la pérdida de poder adquisitivo. Con un discurso que mezcla provocación y reivindicación de su modelo, el presidente sigue apostando por la polarización como estrategia política.
Mientras tanto, la oposición evalúa cómo responder a un Milei que no solo celebra los datos económicos, sino que lo hace desafiando directamente a sus adversarios. En un contexto de tensión política y social, su mensaje deja en claro que no tiene intención de moderar su estilo ni suavizar sus enfrentamientos con el kirchnerismo.

