Al final Oscar Piastri logró confirmar todo lo que fue construyendo durante el fin de semana en Bahréin. En el marco de la cuarta fecha del campeonato mundial de la Fórmula 1, el australiano logró un excelente triunfo con el McLaren que lo posicionan nuevamente en la lucha por el campeonato de pilotos. El equipo inglés volvió a dar muestras de su contundencia con un excelente trabajo de Lando Norris que se recuperó de una mala clasificación que lo obligó a largar algo retrasado y a un mal comienzo de competencia luego de ser sancionado por una mala ubicación en el cajón de salida.
La segunda posición fue para el Mercedes Benz de George Russell quien tuvo un gran trabajo a lo largo de la carrera. El joven piloto ingles tuvo que luchar mucho con una complicación con el sistema electrónico de su volante que no le permitía contar con el sistema de DRS al momento de intentar atacar al puntero en la segunda parte de la competencia. Este inconveniente también condicionó su funcionamiento y le permitió a Lando Norris acercarse peligrosamente. Este problema podría valerle una sanción que estudiarían los comisarios luego de la competencia.

No hubo sorpresas. Se confirmó la clara tendencia que se venía demostrando desde el inicio del fin de semana y este gran momento de McLaren le permite establecerse como la referencia no solo en la carrera por el titulo de constructores, sino que ahora mantiene a los dos pilotos en el primer y segundo puesto del campeonato de pilotos con Lando Norris como el mejor posicionada. Sin dudas la escudería logró un nuevo triunfo que significa un duro golpe para sus rivales que vuelven a ser testigos de un gran trabajo de los autos de color naranja.
Para Ferrari esta fue una competencia que pudieron recuperar el terreno perdido por parte de Hamiton. Leclerc volvió a ser competitivo a una distancia considerable del puntero, pero el monegasco logró involucrarse en los primeros puestos. Por el lado del múltiple campeón la situación fue diferente y una vez más el inglés se encargo de demostrar toda su vigencia y su capacidad para poder meterse en la quinta colocación luego de batallar y trabajar de manera intensa aun con un auto que todavía no esta a la altura de sus pretensiones.
Para Max Verstappen el paso por el circuito de Shakir fue una permanente lucha contra las dificultades que se fueron presentando a lo largo de la competición. Primero fue la detención en boxes en su primer intento. En ese momento la luz de marcación no funcionó como debía y allí perdió tiempo. Luego y en la segunda detención un problema en la rueda delantera izquierda complicó su parada en los pits. Además el neerlandés tuvo que sufrir el bajo rendimiento de los compuestos duros que no lograron dar el resultado esperado por el equipo Red Bull.
El GP de Bahréin significó una muy buena tarea del equipo Alpine que logró ubicar a Pierre Gasly en la séptima posición perdiendo un lugar sobre el final de la competición en manos de Max Verstappen que pudo superar al francés a falta de dos curvas para la bandera a cuadros. Este era un resultado necesario para la escudería de origen francés que hasta el momento no había sumado puntos en la temporada. Jack Doohan terminó en el puesto 15. Sin dudas el trabajo de Franco Colapinto en el simulador significó un gran avance en el potencial de las dos unidades.