La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, denunció este jueves que un grupo de barras bravas del club Vélez Sarsfield emboscó a agentes de la Policía de la Ciudad que se encontraban jugando un partido informal en un predio cercano al estadio del club. La funcionaria aseguró que los agresores “robaron un arma reglamentaria y apuntaron contra los oficiales”, y calificó el hecho como una acción organizada propia de una “asociación ilícita”.
El hecho ocurrió en una cancha de fútbol 5 ubicada en Juan B. Justo y Barragán, a escasos metros del estadio José Amalfitani. Allí, un grupo de policías de civil disputaba un encuentro deportivo cuando fue interceptado por integrantes de la barra, que regresaban tras el partido en el que Vélez debutó en la Copa Sudamericana contra Peñarol.
El detonante: una prenda de Peñarol y una discusión que escaló
Según el relato oficial, el desencadenante del ataque fue la presencia de un jugador con un pantalón del club uruguayo. Al identificarlo, los barras comenzaron a insultar y provocar a los agentes. La situación escaló rápidamente y derivó en una batalla campal que incluyó golpes, disparos al aire y corridas. Uno de los policías intentó dispersar a los atacantes disparando con su arma reglamentaria, pero fue despojado de ella, lo que derivó en un segundo disparo efectuado por un hincha.
Bullrich utilizó su cuenta en la red social X para referirse al incidente con dureza: «Barras bravas de Vélez emboscaron y atacaron a policías de la Ciudad que jugaban un partido de fútbol, llegando incluso a robarles un arma y apuntarles. Estas mafias son asociaciones ilícitas. Viven de la violencia y se creen dueñas del fútbol y de las calles», escribió.
La ministra prometió sanciones y repudió la impunidad
La ministra también compartió un video del momento del ataque dentro del predio deportivo y remarcó que «la violencia de siempre, con los mismos de siempre, se terminó». «La PFA los detuvo a todos y jamás volverán a pisar un estadio. La ley y el orden se hacen respetar», concluyó.
El enfrentamiento ocurrió al término del partido entre Vélez y Peñarol. Según testigos, los barras identificaron a uno de los jugadores por su vestimenta, ingresaron al complejo y se desató un violento enfrentamiento cuerpo a cuerpo que duró varios minutos.
34 detenidos entre barras e integrantes de la fuerza
El saldo del episodio fue de 34 personas detenidas, de las cuales 21 pasaron la noche en el predio: 13 barras bravas y 8 policías. A los demás se los liberó luego de la identificación. La Policía Federal debió intervenir para controlar la situación. Específicamente, luego de que uno de los agresores respondiera con un disparo tras arrebatar el arma a un agente.
La causa quedó a cargo del juzgado de turno, que ahora deberá determinar la responsabilidad penal de los involucrados y evaluar si corresponde la figura de asociación ilícita, como denunció Bullrich. Además, se investigará el uso de armas reglamentarias en un ámbito privado.
Discusión sobre seguridad y violencia en el fútbol
El conflicto reabre el debate sobre el rol de las barras bravas y el uso de armas por parte de efectivos fuera de servicio. Desde el Ministerio de Seguridad aseguraron que a los implicados se los incluirá en el programa Tribuna Segura y no podrán ingresar a ningún estadio del país.
La ministra ratificó su intención de avanzar con medidas ejemplares. “La ley y el orden se hacen respetar”, reiteró en su publicación. Desde la cartera de Seguridad señalaron que se trabaja en conjunto con la Justicia para aplicar sanciones que sirvan de precedente ante hechos similares.
