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Rapinha calentó el clásico, pero la Selección Argentina respondió fiel a su estilo en la cancha

El duelo entre dos gigantes estuvo marcado por declaraciones picantes del jugador del Barcelona.

Rapinha

La Selección Argentina y su par de Brasil encabezan una de las rivalidades más parejas y sostenidas en la historia del fútbol. Por tal razón, sus partidos movilizan pasiones y sentimientos encontrados, que van variando de acuerdo a cómo se comporte la pelota en el verde césped. Es que no solo es la representante del conjunto masculino nacional en su deporte, los once jugadores pasan a ser prácticamente los embanderados de su país.

Hace solo días se disputó una nueva versión de este clásico que tuvo su primera vez allá por 1914. Fue el pasado 25 de marzo, en un duelo por las Eliminatorias al Mundial 2026. El duelo entre dos gigantes estuvo marcado por declaraciones picantes de Raphinha, jugador del Barcelona, que encendieron aún más la previa del clásico.

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Cómo fueron las provocativas palabras de Rapinha

En días anteriores al encuentro, Raphinha no dudó en expresar su confianza y lanzar provocaciones hacia la Selección Argentina. En una entrevista con el legendario Romario, el delantero brasileño afirmó que estaba seguro de la victoria de Brasil. Estas declaraciones no pasaron desapercibidas y generaron un fuerte revuelo en los medios y redes sociales.

Se hablaba desde la previa que la respuesta argentina no se haría esperar. Y así fue. Algunos medios informaron que los albicelestes habían planeado mostrar el trofeo de la Copa del Mundo 2022 antes del partido como un gesto psicológico para reafirmar su dominio sobre Brasil. Pero, al final resultó una noticia falsa. Aunque la tensión siguió latente todo el partido.

Este intercambio de palabras elevó las tensiones y preparó el escenario para un clásico plagado de emociones.

El duelo en la cancha

El encuentro comenzó con una intensidad palpable, alimentada por las declaraciones previas. Pese a que Brasil intentó imponer su juego desde el inicio, Argentina mostró una determinación implacable encabezada por figuras como Julián Álvarez y Lautaro Martínez. La defensa argentina también fue clave, neutralizando los intentos de Vinícius Jr. y Rodrygo Goes.

El marcador se inició rápidamente con un gol de Julián Álvarez tras una jugada colectiva brillante. Enzo Fernández  amplió la ventaja con un disparo certero desde fuera del área. Aunque Brasil pudo descontar con un gol de Cunha, Argentina respondió con dos tantos más que sellaron el resultado final de 4-1. La actuación del equipo de Lionel Scaloni fue una demostración contundente de superioridad táctica y técnica.

El triunfo de Argentina y el impacto psicológico

La victoria del equipo de Scaloni no solo representó tres puntos cruciales para Argentina en las Eliminatorias, sino también una victoria simbólica en el plano psicológico. Tras años de dominio brasileño en la región, los vigentes campeones del Mundo reafirmaron su posición como tales y líderes indiscutibles del fútbol sudamericano.

Las provocaciones de Raphinha terminaron siendo contraproducentes para Brasil. Al acabar el encuentro, el jugador mostró frustración y evitó hacer declaraciones públicas. Por otro lado, Lionel Scaloni hizo foco en la importancia de mantener la calma ante las provocaciones externas: «La mejor respuesta siempre está en el campo», manifestó.

Hablar de más tiene su consecuencia

Las palabras de Raphinha prendieron la previa del clásico, pero terminaron siendo el combustible que motivó a Argentina a salir al Estadio Monumental con una energía desbordante. El resultado final no solo consolidó a los albicelestes como favoritos de cara al Mundial 2026, sino que también reforzó la moral del equipo y sus hinchas.

Este clásico será recordado como otro capítulo épico en la histórica rivalidad entre Argentina y Brasil. Una vez más quedó demostrado que, a pesar que las palabras pueden calentar el ambiente, es el rendimiento en la cancha lo que define quién se lleva la gloria.