A partir de ahora las dietas de los senadores se actualizarán desde mayo, luego de que la resolución que las mantenía congeladas expirara el 31 de marzo, sin una renovación formal. La norma, firmada en enero por Victoria Villarruel, impedía el ajuste automático según el valor del módulo de referencia del Congreso. Con la caducidad de esta disposición, 71 de los 72 senadores recibirán un haber base de al menos $9 millones en bruto.
He firmado el Decreto que ordena el congelamiento de las dietas de los senadores hasta el 31 de marzo de 2025 para que lo traten en sesiones ordinarias. Adhirieron a mi pedido los bloques Frente Renovador de la Concordia Social, LLA, PRO, UCR, Las Provincias Unidas y Libertad,… pic.twitter.com/01vR1XBNZY
— Victoria Villarruel (@VickyVillarruel) January 2, 2025
La vicepresidenta optó por no intervenir y dejó la decisión en manos del pleno de la Cámara alta. Sin una votación que lo modifique o un nuevo decreto, la suba se aplicará de forma automática.
?AUMENTA LA DIETA DE LOS SENADORES: COBRARÁN EL EQUIVALENTE A 25 JUBILACIONES MÍNIMAS
— A24.com (@A24COM) March 31, 2025
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Tres senadores rechazaron la suba
Pese al ajuste generalizado, tres legisladores manifestaron su intención de mantener el congelamiento: los santacruceños José María Carambia y Natalia Gadano, hasta fin de año, y el cordobés Luis Juez, del PRO. Este último mantiene una postura crítica hacia la Cámara alta, lo que ha generado tensiones dentro de su propio bloque.
Para que el congelamiento continúe, es necesario que el Senado tome una resolución formal en el recinto. Sin ese paso, la petición de estos senadores no tendría efecto.
Cómo se determinan las dietas
El esquema salarial de los senadores se estableció en abril de 2024, cuando oficialismo y oposición acordaron un nuevo sistema. Desde entonces, la dieta se compone de 2.500 módulos, con un extra de 1.000 por representación y 500 adicionales por desarraigo.
En este último punto, solo cuatro senadores renunciaron a percibir el extra por residencia fuera de la Ciudad de Buenos Aires. Además, el esquema prevé un adicional para compensar el aguinaldo, lo que elevó la cifra actual por encima de los $7 millones en bruto.
El impacto de la decisión
El Congreso ya había enfrentado críticas cuando, en julio y agosto pasados, un incremento del 6,6% en los salarios de empleados legislativos derivó en la anulación de la suba y el congelamiento de las dietas. En noviembre, se acordó una paritaria similar a la del Ejecutivo, con un aumento del 6,13% acumulado hasta diciembre. Sin embargo, los senadores mantuvieron su congelamiento hasta fin de año.
Con el nuevo escenario, la reactivación de los aumentos vuelve a poner en debate el financiamiento de la política y los costos del Congreso. Mientras algunos sectores defienden la actualización para evitar una pérdida de poder adquisitivo, otros cuestionan el impacto de estas subas en el contexto económico del país.