Un accidente de helicóptero ocurrido este jueves en el río Hudson, a la altura de Manhattan, dejó un saldo de seis muertos, entre ellos tres niños, según confirmó el alcalde de Nueva York, Eric Adams. La aeronave, un Bell 206, transportaba a una familia de turistas españoles junto al piloto. Todos fallecieron tras caer al agua.
Hasta el momento no se conocen las causas del siniestro. Un testigo que habló con el canal NBC4 aseguró que el helicóptero habría perdido su hélice antes de impactar contra el agua. Las imágenes transmitidas por medios locales muestran cómo la nave se precipitó rápidamente en el sector del Hudson que separa Nueva York de Nueva Jersey.
Turistas españoles entre las víctimas del accidente de helicóptero
El accidente ocurrió cerca de las 15:17, cuando los bomberos recibieron una llamada de alerta. Equipos de rescate de Nueva York y Nueva Jersey llegaron con rapidez. Según fuentes oficiales, las seis personas fueron extraídas del agua sin vida.
En fotografías difundidas por AFP se ven los pantines de aterrizaje del helicóptero sobresaliendo en la superficie. Una embarcación del Cuerpo de Ingenieros del Ejército colaboró en las tareas. El lugar del impacto está próximo a la autopista West Side de Manhattan, una zona con constante actividad aérea y fluvial.
El río Hudson es un corredor habitual para helicópteros turísticos y de negocios. A diario despegan y aterrizan naves que ofrecen recorridos panorámicos sobre la Estatua de la Libertad y el perfil urbano de Manhattan.
No es el primer hecho trágico en la zona. En 2018, un helicóptero cayó en el río East y murieron cinco personas. En 2009, un helicóptero chocó con una avioneta y hubo nueve víctimas fatales. Ese mismo año, un avión de US Airways amerizó sobre el Hudson con 155 personas a bordo. Todos sobrevivieron, en lo que luego se llamó el «Milagro en el Hudson».
El río tiene una profundidad de hasta 60 metros y temperaturas cercanas a los 8 grados en esta época, lo que dificulta las maniobras de rescate. La tragedia de este jueves vuelve a poner la lupa sobre la seguridad de los vuelos turísticos en una ciudad densamente poblada como Nueva York.