El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue sometido este domingo a una compleja cirugía intestinal que se extendió por más de 12 horas en un hospital de Brasilia. Aunque su evolución es «muy buena» y está consciente, los médicos advirtieron que el posoperatorio será «delicado y prolongado» y no hay una fecha prevista para su alta.
El cardiólogo Leandro Echenique confirmó en conferencia de prensa que Bolsonaro, de 70 años, «está clínicamente estable, sin dolor, y recibiendo apoyo clínico, nutricional y medidas de prevención de infecciones». Según el parte oficial, el exmandatario aún permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos, pero será trasladado a una sala común “en el momento oportuno”.
La cirugía buscó resolver una obstrucción intestinal provocada por un pliegue en el intestino delgado, una condición que le generó fuertes dolores abdominales y que no cedió con los tratamientos iniciales. El jefe del equipo médico, Cláudio Birolini, explicó que fue necesario analizar “centímetro a centímetro” el órgano para eliminar adherencias generadas por intervenciones quirúrgicas previas.
«El intestino estaba bastante sufrido. Logramos resolver el problema, pero ahora necesita desinflamarse antes de reintroducir la alimentación por vía oral. No esperamos una evolución rápida», sostuvo Birolini, quien remarcó que el objetivo es que Bolsonaro «pueda volver a una vida normal, sin restricciones».
La internación de Bolsonaro
El expresidente y líder del Partido Liberal de Brasil fue internado el viernes tras experimentar molestias mientras participaba en actos políticos en el estado de Rio Grande do Norte. Fue trasladado de urgencia desde Natal a Brasilia en un avión sanitario, luego de que no presentara mejoría con medidas clínicas como ayuno, sonda gástrica e hidratación intravenosa.
El cuadro actual es más grave que los episodios anteriores de suboclusión que enfrentó Bolsonaro desde el atentado que sufrió en 2018, cuando fue apuñalado durante la campaña electoral. A raíz de aquel ataque, que afectó su sistema digestivo, ha tenido que someterse a múltiples cirugías en los últimos años.
Esta nueva internación se da en un momento político sensible. Bolsonaro enfrenta un juicio por presunto intento de golpe de Estado tras las elecciones de 2022, mientras continúa siendo la figura más influyente de la derecha brasileña. Afuera del hospital, simpatizantes oran por su recuperación, mientras el país sigue de cerca la evolución de su estado de salud.
?AGORA: Fantástico mostra que cirurgia de Bolsonaro durou 12 horas e que o primeiro socorro do SUS foi fundamental para o sucesso do procedimento. pic.twitter.com/5UYNVPioji
— Bruno Guzzo® (@BrunoGuzz0) April 14, 2025
