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ECONOMÍA

El Gobierno nacional analiza emitir deuda para captar dólares sin esperar que el tipo de cambio toque los $1.000

Apunta a fondos extranjeros y bancos para reforzar las reservas sin alterar el esquema cambiario. La estrategia evitaría presiones monetarias y cumpliría las metas con el FMI.

Gobierno

En un contexto donde el tipo de cambio oficial se mantiene estable dentro de la banda establecida por el Gobierno, el equipo económico evalúa una alternativa innovadora para sumar reservas sin necesidad de esperar que el dólar caiga al piso de los $1.000. La propuesta consiste en emitir títulos públicos que permitan captar divisas directamente del exterior, apelando a fondos de inversión y bancos internacionales, en una maniobra que refuerza la estabilidad sin alterar el plan de desinflación.

La posibilidad fue deslizada por el director del Banco Central, Federico Furiase, durante su participación en el streaming de Carajo. Allí, explicó que si bien el BCRA no interviene en el mercado para acumular reservas dentro de la banda cambiaria, existen otros instrumentos —como la cuenta capital o colocaciones del Tesoro— para fortalecer el colchón de divisas sin alterar la política monetaria actual.

Bonos en pesos y en dólares, con respaldo extranjero

El equipo que lidera Luis Caputo estudia la emisión de dos tipos de instrumentos: bonos en pesos suscriptos con dólares y bonos directamente en dólares, ambos con el objetivo de absorber divisas del exterior y cumplir con las exigencias del FMI. La medida buscaría evitar que el Gobierno deba esperar a que el tipo de cambio llegue al piso de la banda para comprar reservas, un escenario que podría demorarse.

La estrategia apunta principalmente a fondos extranjeros y bancos globales, que se mostrarían interesados tras la reciente flexibilización que permite a inversores no residentes ingresar divisas y acceder al mercado cambiario luego de seis meses. El movimiento se interpreta como un incentivo para participar en emisiones de deuda local sin presionar el mercado oficial.

Rumores de canje y control de expectativas

En paralelo, versiones surgidas desde Nueva York insinuaron la posibilidad de un canje de deuda ante el vencimiento de pagos por US$ 4.500 millones en julio. Desde el Ministerio de Economía descartaron categóricamente esa alternativa y aseguraron que los recursos ya están garantizados. Sin embargo, el planteo de nuevas colocaciones opera también como señal preventiva para el mercado.

«Es viable. Con los dólares del FMI y lo que ya se recibió, el BCRA está recapitalizado. Pero si se necesitan más reservas, pueden ingresar por deuda sin emitir pesos», explicaron desde el entorno oficial. La clave, insisten, es evitar incrementar la base monetaria mientras se mantiene la tasa de devaluación controlada.

Intervenciones tácticas en el mercado de futuros

Según datos de la consultora 1816, en las últimas jornadas se detectó una intervención inusualmente agresiva en el mercado de futuros: el interés abierto creció en US$ 869 millones en una sola rueda, una cifra récord durante la gestión de Milei. Aunque el FMI no prohíbe estas maniobras, el staff del organismo había señalado que el Gobierno «no esperaba» intervenir. La acción, sin embargo, sirvió como «endulzante» para futuros inversores: bajó las expectativas de devaluación y facilitó la toma de posiciones.

En ese marco, economistas como Nicolás Gadano y Fernando Baer coincidieron en que la colocación de deuda contra dólares es una herramienta válida en el actual contexto, siempre que no implique un desequilibrio mayor entre la rentabilidad de las reservas y la tasa que pagan los bonos.

La presión de los vencimientos y la meta con el FMI

Desde el pico del 28 de abril, las reservas brutas del BCRA descendieron de US$ 39.300 millones a US$ 38.000 millones, producto de pagos de deuda. A eso se suma el compromiso con el FMI de acumular más de US$ 4.000 millones en los próximos 40 días. La emisión de deuda podría ser una vía para alcanzar esa meta sin recurrir a la emisión monetaria, en línea con el sendero de orden fiscal y estabilidad que promueve el Gobierno.

Sebastián Menescaldi, director adjunto de EcoGo, estimó que el Gobierno tiene ya garantizados US$ 2.770 millones, sumados a los US$ 500 millones del BID aún pendientes de desembolso. El resto podría cubrirse con un REPO, los nuevos bonos o incluso con depósitos del Tesoro engrosados por utilidades del BCRA.

Wall Street observa con atención

La iniciativa oficial fue bien recibida en los circuitos financieros de Wall Street. Allí, el viceministro José Luis Daza mantuvo encuentros con bancos para evaluar posibles colocaciones. «No es extraño que evalúen este mecanismo: es limpio, no toca el mercado cambiario y da previsibilidad al plan económico», afirmaron operadores en Nueva York.