El vocero presidencial Manuel Adorni confirmó este lunes un nuevo recorte del Gobierno nacional que abarca áreas sensibles de la administración pública. La gestión de Javier Milei resolvió transformar la Secretaría de Derechos Humanos en una subsecretaría y avanzar con la centralización de estructuras culturales. Según precisó el portavoz, el plan de ajuste ya eliminó 200 áreas estatales, 10 ministerios y dio de baja 45.000 contratos.
Durante su habitual conferencia de prensa, Adorni detalló que el área de Derechos Humanos sufrirá un recorte del 40% en su estructura y del 30% en su planta de personal, lo que implicará un ahorro fiscal de más de 9.000 millones de pesos anuales. «Ahora sí se encargará de garantizar todos los derechos humanos y no de defender un sector ideológico partidario», afirmó.
Cambios en Cultura: centralización y eliminación de organismos
El Ejecutivo también avanzará con transformaciones en el sector cultural. Una de las medidas más destacadas es la modificación del artículo que otorgaba autarquía al Instituto Nacional del Teatro (INT), que ahora pasará a estar bajo control centralizado. Se eliminará su Consejo Directivo y los representantes provinciales, y se mantendrá su esquema de financiamiento actual.
Además, se designará a Federico Brunetti como nuevo director nacional. Desde el Gobierno aseguran que estas medidas buscan reducir el gasto administrativo y promover una asignación más eficiente de los recursos.
Otros espacios como el Museo Nacional de Bellas Artes, Tecnópolis, Palacio Libertad y la CONABIP también pasarán a estar bajo estructuras centralizadas. En paralelo, se creará el Instituto Nacional de Investigaciones Históricas, que absorberá a organismos como el Instituto Sanmartiniano y el Instituto Evita, los cuales se transformarán en museos nacionales.
En tanto, los Institutos Yrigoyeneano y Rosas se fusionarán en la nueva entidad, y otros como el Belgraniano, Newberiano y Browniano serán disueltos. Sus funciones serán incorporadas a la nueva estructura con el objetivo de reducir costos y concentrar decisiones políticas.
Subsidios, jubilaciones y veto a la oposición
En otro tramo de la conferencia, Adorni volvió a ratificar el rumbo fiscal del Ejecutivo y advirtió que serán vetadas las leyes que atenten contra el equilibrio económico. Entre ellas, mencionó los proyectos opositores para ampliar las moratorias y entregar un bono a jubilados.
«Las jubilaciones se actualizan por inflación. En un sistema quebrado como el que heredamos, los trabajadores activos sostienen a los pasivos. Por eso, para que mejoren las jubilaciones, primero deben mejorar los salarios», expresó el funcionario.
También reafirmó que 15.500 usuarios de Puerto Madero y barrios privados del AMBA serán excluidos del régimen de subsidios energéticos, tras detectarse que muchos de ellos figuraban como hogares de ingresos bajos o medios. «La energía cuesta, y quien pueda pagarla, debe hacerlo», sostuvo.
Ajuste, centralización y mensaje político
Con estos anuncios, el Gobierno ratifica su hoja de ruta de achicar el Estado y recortar privilegios que considera impropios. El mensaje apunta a reforzar la narrativa del ajuste con foco en eficiencia y ahorro. “Se terminó el subsidio para quienes no lo necesitan”, remarcaron desde Casa Rosada.