La propuesta impulsada por rectores, docentes y gremios para aumentar el financiamiento de las universidades públicas fue desestimada por La Libertad Avanza, que considera que la iniciativa no representa un obstáculo para seguir avanzando en un posible acuerdo electoral con sectores del radicalismo bonaerense.
Un dirigente libertario lo resumió con contundencia: «No pasarán». Así respondió ante la presión de diputados kirchneristas y del progresismo que, en una reunión en la Cámara baja, manifestaron su apoyo al nuevo proyecto de ley que busca reflotar el financiamiento universitario. La iniciativa había sido vetada por el Poder Ejecutivo el año pasado por su impacto negativo en las cuentas públicas.
La interna radical y el pacto electoral en Provincia
Desde el oficialismo descartan que el avance de este proyecto altere las conversaciones en curso con referentes del radicalismo bonaerense, en particular con el sector que lidera el senador Maximiliano Abad. Aunque en 2023 Abad votó a favor del texto vetado, ahora los libertarios aseguran que diferencian entre los actores internos de la UCR.
«No son todos lo mismo», afirman desde el entorno del presidente Milei. La expectativa está puesta en que Abad, exdirigente de Franja Morada, no se pliegue a esta nueva embestida que impulsa la conducción de la UBA y sectores alineados con el kirchnerismo.
Dos marchas, una victoria
En La Libertad Avanza recuerdan que, pese a las movilizaciones masivas en defensa de la universidad pública, el Gobierno logró salir fortalecido. Consideran que esas manifestaciones no debilitaron su gestión y que, en cambio, dejaron en evidencia las inconsistencias del progresismo, que ahora busca revivir un tema ya resuelto institucionalmente.
Para los libertarios, la insistencia en un nuevo proyecto —previsto para ser tratado en Diputados el 19 de junio— es apenas una reacción desesperada. «Este proyecto parece un manotazo de ahogado», deslizaron.
Reunión opositora y resistencia gremial
El miércoles, referentes de Unión por la Patria, la izquierda, Encuentro Federal y la Coalición Cívica se reunieron en Diputados con representantes universitarios y gremios docentes para promover el avance de la iniciativa. Según indicaron, buscan «garantizar la protección y el sostenimiento del financiamiento de las Universidades Nacionales en todo el país».
Sin embargo, el oficialismo interpreta la movida como un intento de reposicionamiento político frente a su propia debilidad electoral. «No tienen agenda, les cuesta entrarnos por algún lado. Así como perdieron con las jubilaciones, también pierden acá», afirmaron desde el Gobierno.
El valor del diálogo con el interior
En el entorno libertario valoran el vínculo con referentes de peso en el interior bonaerense y remarcan que no toda la UCR responde a la misma lógica. «Tavela no es Maxi», señalaron, marcando distancia entre quienes empujan el proyecto desde Diputados y los sectores con los que el oficialismo mantiene conversaciones serias.
Por ahora, los contactos entre Abad y el Gobierno se han canalizado a través del asesor presidencial Santiago Caputo, sin participación directa de Karina Milei ni del armador Sebastián Pareja. La negociación avanza, aunque aún no se ha traducido en un acuerdo formal.
Estrategias provinciales divididas
La estrategia nacional de Milei contrasta con los movimientos provinciales del radicalismo. Mientras Leandro Zdero selló una alianza exitosa con los libertarios en Chaco, Maximiliano Pullaro en Santa Fe eligió competir por fuera y también logró imponerse. El escenario bonaerense, con Abad como figura central, será determinante.
La tensión por el financiamiento universitario, lejos de amenazar esa construcción, podría reafirmar los roles: el kirchnerismo agita un reclamo que ya fracasó, y el Gobierno se mantiene firme en su compromiso con el equilibrio fiscal, sin ceder a la presión de sectores corporativos.
