El escándalo que sacude al PAMI sumó un nuevo capítulo explosivo: la diputada nacional Lourdes Arrieta presentó un proyecto en el Congreso para crear una comisión investigadora que eche luz sobre el funcionamiento interno del organismo, y directamente puso en la mira a la secretaria de la Presidencia, Karina Milei, y a su principal operador político, Eduardo “Lule” Menem.
Arrieta, que responde al monobloque Fuerzas del Cielo, denunció una situación “alarmante” dentro de la obra social de jubilados y pensionados, y pidió que se indaguen desde contrataciones irregulares hasta posibles designaciones políticas direccionadas. En ese marco, incluyó la participación de altos funcionarios del Ejecutivo entre los temas a investigar.
La propuesta, elevada formalmente en la Cámara de Diputados, contempla la creación de una comisión especial con facultades para recabar información sobre los mecanismos de financiamiento, la asignación de cargos jerárquicos, y el uso de recursos públicos desde la llegada de La Libertad Avanza al poder en diciembre de 2023.
“La ciudadanía no puede tolerar que un organismo tan sensible como el PAMI sea transformado en una herramienta de disciplinamiento político o en una plataforma de negocios personales”, sostuvo la diputada mendocina. Y remarcó que las denuncias por corrupción, los recortes en medicamentos esenciales y los despidos masivos han sido una constante en estos meses.
Según el proyecto, se busca investigar si hubo “uso partidario de fondos públicos, contratación de personal sin criterios técnicos, y presiones o influencias de altos funcionarios en decisiones administrativas del PAMI”. Arrieta fue aún más directa al mencionar a Karina Milei, a Lule Menem y a Diego Vartabedian, todos cercanos al presidente Javier Milei.
“El PAMI debe ser sinónimo de bienestar para nuestros adultos mayores, no un botín de guerra en medio de una interna política feroz”, disparó Arrieta, y pidió transparencia total en la gestión del organismo.
La ofensiva legislativa no pasó desapercibida y promete abrir un frente caliente en el Congreso, donde el oficialismo deberá dar explicaciones mientras el clima interno en La Libertad Avanza se vuelve cada vez más tenso.