Con bombos, platillos y discursos sobre eficiencia, el Gobierno nacional lanzó un masivo examen para evaluar la idoneidad de los empleados estatales del Estado nacional. Sin embargo, el operativo terminó dejando más preguntas que respuestas: según los propios datos oficiales, el 98% de los trabajadores lo aprobó. Ahora, tras gastar más de 2.500 millones de pesos, solo se despedirá al 2% del personal estatal.
La medida quedó formalizada a través de la Resolución 48/2025 del Ministerio de Desregulación y Transformación del Estado, que lleva la firma de Federico Sturzenegger. «A partir del 1° de julio de 2025, solo podrá renovarse o contratar personal que hubiera aprobado la Evaluación General de Conocimientos y Competencias», establece la normativa. Pero el recorte, que prometía una poda profunda, apenas alcanzará a una fracción mínima del plantel estatal.
Según la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), rindieron el examen 41.532 estatales, de los cuales más del 98% lo aprobó sin inconvenientes. «Los reyes del achique y los recortes se gastaron más de 2.500 millones de pesos para estigmatizarnos a los empleados públicos y no pudieron. Fracasaron porque todos rindieron bien», lanzó Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE Nacional.
El dirigente sindical fue más allá en su crítica: «Los maestros de la eficiencia acaban de derrochar cuantiosos recursos públicos en evaluaciones de desempeño que nunca tuvieron sentido. Cualquiera podría haber anticipado el resultado sabiendo que se les exigía probar su idoneidad a trabajadores con 5, 10, 15 y hasta más de 20 años de antigüedad».
La resolución alcanza a todos los trabajadores del Sector Público Nacional: desde organismos descentralizados hasta empresas del Estado, sociedades mixtas y fondos fiduciarios. Sin embargo, el tan anunciado «reordenamiento» del empleo público termina despidiendo a apenas uno de cada cincuenta empleados.
La ATE se burló del plan del Gobierno nacional para reducir la planta estatal
«Parece que finalmente los burros no éramos los trabajadores, sino los funcionarios que empezaron a ingresar hace poco más de un año», ironizó Aguiar y luego agregó: «Ahora esperemos que no insistan, que la corten acá y frenen en el resto del país con la implementación del sistema».