Silvia Lospennato, diputada nacional del PRO y una de las impulsoras de la ley de Ficha Limpia, no ocultó su profunda decepción tras el rechazo en el Senado de la norma que buscaba impedir que personas con condena en segunda instancia accedan a cargos electivos.
En declaraciones a Radio Mitre, la legisladora, que además es candidata en las elecciones porteñas del próximo 18 de mayo, reveló que el resultado adverso le provocó una crisis personal y política. “Me provocó una decepción tan grande. Esa sensación de frustración que supongo le pasó a los millones de personas que pensábamos tener ley de Ficha Limpia esa noche”, expresó con un tono cargado de tristeza y enojo.
El proyecto, que ya contaba con media sanción de Diputados, fue rechazado en la Cámara Alta por 36 votos afirmativos contra 35 negativos, tras el sorpresivo cambio de posición de los senadores Carlos Arce y Sonia Rojas Decut, ambos de Misiones, que inicialmente se habían comprometido a votar a favor. El giro fue decisivo para que no se alcanzara la mayoría simple necesaria para su aprobación.
“Me generó una decepción porque, al fin y al cabo, la voluntad, el empeño, el trabajo de miles y miles de ciudadanos argentinos… todos los que esperaban la ley, y un grupo de personas mínimo -senadores-, que no representan a la mayoría de los argentinos, decide la impunidad, deciden sostener la corrupción. Corruptos que cuidan a corruptos, que garantizan impunidad”, disparó Silvia Lospennato, visiblemente afectada.
La diputada no dudó en calificar la votación como una victoria para la política más oscura, la que se defiende a sí misma antes que al ciudadano. “Pensé en qué sentido tiene la política si no vamos a cambiar nada. Te podés robar un país, te juzgan, y el Senado dijo que así y todo podés ser candidato. La política, nuevamente, legislando para la política”, remarcó.
También admitió que tras el resultado tuvo una charla con Mauricio Macri en la que le planteó su desánimo. “A Macri le dije que iba a ver qué hacía, pero había perdido la esperanza, me sentía burlada y creíamos que la ley salía, que los votos estaban, y de pronto dos senadores se cambiaron y le garantizaron la impunidad a Cristina”, sentenció.
El rechazo a la Ley de Ficha Limpia no sólo deja sin efecto una iniciativa con amplio respaldo ciudadano, sino que también deja al descubierto las grietas internas de una política que, para muchos, sigue blindando a los condenados en vez de honrar a los votantes.