En medio de la crisis sanitaria que golpea al Hospital Garrahan, el médico y exministro de Salud de la Nación, Adolfo Rubinstein, cuestionó con dureza los dichos del presidente Javier Milei y encendió las alarmas sobre el rumbo del sistema de salud público en Argentina.
“Estamos ante un emergente de la crisis estructural de la salud pública”, sentenció Rubinstein en diálogo con Radio Rivadavia, donde desmintió los datos difundidos por el oficialismo respecto a la supuesta sobredimensión del personal administrativo en el Garrahan.
“Dicen que hay más administrativos que médicos, pero no es así. El Garrahan tiene más de 1.500 enfermeros, otros 1.500 residentes, 500 médicos, y un equipo enorme de bioquímicos, técnicos y auxiliares que sostienen el hospital. Manipulan los números para instalar otra discusión”, aseguró el exfuncionario.
Críticas al discurso oficial y advertencias por el desfinanciamiento
Rubinstein rechazó los dichos del Presidente, quien calificó al Garrahan como un “curro kirchnerista” y habló de “empleados dibujados”. Para el exministro, el Gobierno intenta “desviar el foco del verdadero problema: el ajuste presupuestario brutal que está desfinanciando la salud pública”.
“No se puede gobernar con slogans de Twitter mientras se desarma un sistema sin tener un plan alternativo. El Garrahan no es una oficina pública, es un centro de alta complejidad, un hospital-escuela de referencia nacional que atiende a miles de chicos de todo el país”, advirtió.
Cuestionamientos por la salida de la OMS
Otro de los puntos que generó preocupación fue la decisión del Gobierno de romper vínculos con la Organización Mundial de la Salud (OMS). Rubinstein fue categórico: “No hay beneficio alguno en aislarse del sistema de salud global. La Argentina queda afuera de debates clave como la preparación ante futuras pandemias, los impactos del cambio climático en la salud o el avance de la inteligencia artificial médica”.
“Salirse de la OMS nos deja solos frente a desafíos globales, y eso puede tener consecuencias sanitarias graves”, advirtió.
Fuga de pediatras y precarización laboral
El médico también expresó su preocupación por la pérdida de profesionales, la fuga de pediatras y la proliferación de contratos temporarios en hospitales públicos. “Se está desmantelando un sistema sin reemplazo. No alcanza con atacar al pasado: hay que planificar el futuro con seriedad”, dijo.
