La situación entre Mauro Icardi y el Galatasaray atraviesa un momento de alta tensión. Según información reciente del periodista Juan Etchegoyen en Radio Mitre, el delantero argentino podría enfrentar duras consecuencias económicas por su conducta en los últimos meses, especialmente por no realizar su recuperación en Turquía, algo que no habría caído bien en el club.
La molestia de la dirigencia del Galatasaray hace evidente con el paso de las jornadas. Aunque el club está muy cerca de consagrarse campeón, y Icardi ya viajó a Estambul para estar presente en el posible festejo, le espera una noticia poco grata: no recibirá ningún tipo de bonificación económica relacionada con el logro deportivo del equipo. A pesar de que su contrato incluiría un premio por el campeonato, el club habría decidido dejarlo fuera de ese beneficio debido a su prolongada ausencia del país y su escasa participación presencial en la temporada.
Más allá de esta medida, se confirmó que Mauro Icardi sí percibió el total de su contrato a comienzos de la temporada. Sin embargo, el premio vinculado a la consagración del Galatasaray en la liga —algo que representa una parte importante del ingreso anual de muchos futbolistas— le será negado, como forma de castigo simbólico y económico por no haber acompañado al plantel en Turquía durante su proceso de recuperación.
Este gesto por parte del club tiene un fuerte mensaje disciplinario: la lealtad y el compromiso con el equipo no solo se miden dentro de la cancha. Si bien Mauro Icardi fue clave en varios momentos de la campaña y mantiene un fuerte vínculo con los hinchas, la dirigencia no está dispuesta a pasar por alto lo que considera una falta de responsabilidad profesional.
La tajante postura del club turco
Desde el entorno del futbolista no hubo declaraciones oficiales, pero se especula con que no habrá reclamos por esta decisión. Incluso dentro del club sostienen que sería inapropiado que Icardi exigiera el bono, dado el buen trato que recibió en todo momento por parte del Galatasaray.
En resumen, la relación entre Mauro Icardi y el club turco se mantiene tensa, y aunque el argentino estará presente para celebrar un posible título, lo hará sabiendo que, esta vez, no habrá premio económico por levantar la copa.
