El Gobierno modificó la programación de Paka Paka con un nuevo contenido para infancias que generó polémica en redes sociales. Tal es así que hasta el exministro de Cultura bajo la administración de Mauricio Macri, Pablo Avelluto, arremetió contra los cambios aplicados por los libertarios en la señal televisiva, la cual por lo general muestra contenidos sobre cultura, historia y temas educativos adaptados para niños y niñas.
«Intentan imponer valores, ideas, conceptos, un modo de relacionarnos entre nosotros. Es un proyecto que no sólo se da en Argentina, sino a nivel global», cuestionó el dirigente que formó parte del Gobierno de Cambiemos. En este marco, agregó que él «podía tener diferencias con algunos contenidos durante el kirchnerismo, pero lo que se ve ahora es completamente distinto. Antes discutíamos como suizos. Hoy estamos viendo cómo le bajan línea ideológica a los chicos desde un canal público«, comparó Avelluto en Mañana Sylvestre.
Para Avelluto lo más preocupante es el uso del aparato estatal para intentar modificar el pensamiento de la sociedad por medio del canal estatal: «Una cosa es pensar diferente, y otra es imponer tus ideas a los demás, a tus hijos, a los que no piensan como vos. Eso no es una república, no es pluralismo. Es autoritarismo, y debemos combatirlo más allá de nuestras identidades ideológicas», arremetió el exfuncionario en Radio 10.
En este plano, remarcó la necesidad de salir de la parálisis opositora sobre las medidas del reciente Gobierno e instó a constuir algo con las críticas al Gobierno: «Nos indignamos, tuitiamos, hablamos por radio… pero todo parece insuficiente. Tenemos que convertir esa indignación en una fuerza positiva, con mejores ideas», deseó.
Quiebre político
Por otro lado, el funcionario cercano a Mauricio Macri aseguró que la fragmentación política le dio lugar a Javier Milei y que eso debería ser utilizado para que la sociedad repiense sus actos: «Milei es el resultado del fracaso de la política democrática en Argentina. Dejamos de hablar entre nosotros, y eso abrió la puerta a este experimento autoritario. Hoy el sistema político es como un blindex astillado: todavía está de pie, pero si lo tocás, se viene abajo».
«Podemos discutir todo lo que queramos, pero lo que no podemos hacer es permitir que estos tipos se lleven puesta la democracia. Quieren reconstruir la Argentina a imagen y semejanza de sus ideas. Nuestra responsabilidad ciudadana es evitarlo», planteó el exministro de Cultura de la Nación.
