El fútbol sudamericano recibió una noticia que sacudió el mercado: Fernando Muslera, ídolo absoluto del Galatasaray y referente histórico del arco en la Selección de Uruguay, ya definió dónde continuará su carrera. Aunque muchos daban por hecho su regreso a su país natal para sumarse a Peñarol, un club argentino se adelantó en silencio y cerró su fichaje de forma sorpresiva.
Luego de 14 temporadas en el fútbol turco y 19 títulos conquistados, Muslera puso fin a una era dorada en Europa y dejó en claro que todavía le queda cuerda para competir. La opción de Peñarol parecía natural, tanto por sentimiento como por cercanía. Pero Estudiantes de La Plata entró en escena en el momento justo y le arrebató al “Carbonero” la posibilidad de repatriar al arquero más emblemático de los últimos tiempos en Uruguay.
Estudiantes se movió rápido y cerró el fichaje
Según informó el periodista Nicolás Latini en TNT Sports, el arquero llegará la semana próxima a la Argentina para sellar oficialmente su vínculo con Estudiantes. La operación, manejada con discreción, fue encabezada por Juan Sebastián Verón, quien dio el golpe final para asegurarse al experimentado guardameta.
Mientras Peñarol mantenía avanzadas las conversaciones y parecía tener todo cerrado, en La Plata se ejecutó una maniobra rápida y eficaz. El Pincha no solo sumó jerarquía, sino que envió un mensaje claro de ambición de cara al Torneo Clausura 2025, donde buscará volver a ser protagonista bajo el mando de Eduardo Domínguez.
La decisión de Muslera: ¿por qué eligió Argentina?
El fichaje de Muslera por Estudiantes no solo responde a una cuestión deportiva. El arquero busca nuevos desafíos tras más de una década en Europa, y la posibilidad de competir en el fútbol argentino, con su exigencia y visibilidad, lo sedujo más que la idea de un retorno cómodo a su país. Además, su experiencia en cuatro Mundiales y cinco Copas América lo posiciona como un refuerzo de peso no solo por su rendimiento, sino por su liderazgo en vestuario.
El golpe del Pincha es doble: no solo suma a un arquero de talla internacional, sino que se lo arrebata a uno de los grandes del continente, generando impacto en todo el mercado. En una era donde los regresos suelen tener destino marcado, Estudiantes rompió con el libreto y cambió el desenlace.
Eduardo Domínguez, confirmado para lo que viene
En paralelo a esta incorporación bomba, Estudiantes también resolvió una duda clave: la continuidad de su entrenador. Pese a algunas declaraciones polémicas tras la eliminación por penales ante Aldosivi en la Copa Argentina, finalmente Eduardo Domínguez seguirá en su cargo, decidido a encarar el nuevo semestre con otra energía.
“Tengo que hablar con Marcos (Angeleri)”, había dicho el DT tras la caída, dejando entrever ciertos cortocircuitos internos. Pero el club decidió respaldarlo, y con Muslera como emblema de la renovación, comienza un nuevo capítulo en el equipo platense que promete dar pelea en todos los frentes.
Un mercado que cambia el rumbo del fútbol argentino
La llegada de Fernando Muslera a Estudiantes no es solo una noticia resonante para el club, sino para todo el fútbol argentino. Pocas veces una institución logra seducir a un jugador con semejante currículum, y menos aún cuando tenía la opción de volver a casa. Con este golpe de efecto, el Pincha da un paso firme en su intención de ser protagonista, mientras deja claro que su proyecto va más allá de lo previsible.
