El fallo de la Corte Suprema que podría inhabilitar a Cristina Kirchner para competir en las elecciones legislativas fue recibido con entusiasmo por sectores clave del mercado financiero, aunque los expertos insisten en que el rumbo económico todavía depende, en mayor medida, del éxito o fracaso del plan del Gobierno.
Entre los analistas consultados, hay un consenso claro: la salida de escena de la principal figura del kirchnerismo representa un alivio simbólico, pero no es garantía de mejora en los indicadores económicos.
“Para los inversores, la figura de CFK siempre fue un factor de riesgo. Su posible alejamiento de la política activa genera un clima más favorable, aunque la atención sigue puesta en el programa económico actual», explicó Dante Ruggieri, socio de AT Inversiones.
En la misma línea, informó la agencia de noticias NA, Camilo Tiscornia, director de C&T Asesores, opinó que «el kirchnerismo es percibido como el sector más riesgoso dentro del espectro político argentino, y Cristina es su emblema. Que la justicia avance en su contra es un mensaje que el mercado lee como positivo«.
Sin embargo, no todos comparten un entusiasmo desmedido. Javier Timerman, economista y socio de Adcap Grupo Financiero, fue tajante: “El mercado no reacciona solo por un fallo judicial. Su preocupación central es si Milei puede sostener su plan sin desborde social ni freno político”.
Por su parte, Fausto Spotorno, de OJF & Asociados, fue más escéptico respecto al impacto inmediato: “La noticia puede mejorar marginalmente la percepción de riesgo país, pero Argentina sigue siendo un terreno de alta volatilidad, y el mundo no está dispuesto a asumir riesgos sin certezas institucionales y macroeconómicas claras”.
También desde el sector financiero, Juan Carlos Barboza, gerente de Research de Mariva, consideró que el fallo podría reducir la presión sobre los bonos soberanos y favorecer una mejora en la curva de tasas, aunque matizó: «Todo dependerá de si el Gobierno logra consolidar credibilidad fiscal«.
Mientras tanto, en redes sociales, el economista Lucas Llach celebró la noticia con un enfoque político: “Esto eleva un poco los estándares. Pero para que haya un verdadero cambio necesitamos ver también a empresarios y sindicalistas corruptos tras las rejas. Solo así se puede construir un capitalismo serio”.
En definitiva, aunque el fallo de la Corte fue bien recibido en la City porteña, los especialistas coinciden en que no hay milagros judiciales que curen una economía con déficit crónico, inflación estructural y falta de crédito.
El mercado quiere ver estabilidad política, señales claras de que el ajuste no se va a desbarrancar, y sobre todo, resultados: dólar calmo, baja de tasas, equilibrio fiscal y crecimiento sostenido. En ese tablero, la salida de Cristina puede ser una ficha más… pero no la jugada final.
