En medio de la creciente tensión política y económica que atraviesa el país, la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, rompió el silencio este miércoles y respaldó con fuerza el reciente acercamiento entre Cristina Kirchner y el gobernador Axel Kicillof. Aseguró que el encuentro, ocurrido en las últimas horas, fue “necesario y productivo” para avanzar en una unidad del peronismo que, según sus palabras, es clave para “frenar tanto daño que está haciendo el Gobierno de Javier Milei”.
La dirigente de La Cámpora no dudó en calificar el contacto como un paso urgente en la reconstrucción de un proyecto político que “vuelva a representar a los sectores más golpeados por el ajuste”. En diálogo con el programa Sin Corbata (Radio Splendid), Mendoza señaló que el llamado entre Cristina y Kicillof “fue un gesto hacia toda la militancia y hacia quienes esperan una respuesta política frente al desastre que estamos viviendo”.
“La unidad demanda que los liderazgos se reencuentren. Por eso, lo de ayer fue tan importante”, enfatizó Mendoza, quien en las últimas semanas intensificó su rol en el armado político de la Tercera Sección Electoral, donde Cristina será candidata a diputada.
Desde su gestión en Quilmes, la intendenta describió un panorama alarmante: “Se cae la recaudación, se desploma el consumo en los comercios y la gente no llega a pagar ni las tasas municipales. Estamos muy mal”. También lamentó el freno total de la obra pública, y remarcó que aún hay “más de 3.000 calles de tierra y una cuenca hídrica que necesita intervención urgente”. Según Mendoza, con los recursos actuales no alcanza y es imprescindible el apoyo de la provincia, la nación e incluso financiamiento internacional.
En ese marco, defendió el gesto político de la ex presidenta: “Cristina muestra voluntad de ponerse al frente, de ser alternativa, de repensar un proyecto con vocación de mayoría. La Tercera Sección no es un detalle: representa a millones que hoy están abandonados”.
Finalmente, lanzó una advertencia sobre el rumbo del país: “Estamos perdiendo calidad de vida y calidad institucional. Necesitamos frenar esta situación en unidad, no por cargos, sino para defender a los trabajadores, a las familias y al futuro de la Argentina”.
Mientras Milei insiste con su plan de ajuste fiscal sin anestesia, en el conurbano ya se tejen los primeros movimientos para enfrentarlo. Y Cristina, lejos de la pasividad, parece estar lista para volver a la arena con fuerza propia.