El pasado miércoles se realizó una movilización hacia Plaza de Mayo en defensa de Cristina Kirchner, expresidenta de la nación condenada en la Causa Vialidad a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. Ante esto, un grupo de seguidores y dirigentes peronistas marcharon en contra de la resolución judicial, en un hecho que fue minimizado por el Gobierno.
«En la plaza estuvieron los mismos de siempre. El tren fantasma«, indicó un dirigente libertario a NA al ser consultado sobre la asistencia a la movilización. «Ayer, asistieron entre 40 o 50 mil personas. Una cancha de Huracán» ironizaron en Casa Rosada sobre la adherencia a la marcha, la cual no contó con la participación de la CGT entre las columnas.
En este marco, desde el Gobierno remarcaron que toda la jornada del miércoles se dio dentro de lo esperado por ellos, tanto en la organización como en la concurrencia a la movilización. «Fue como esperábamos que iba a ser. No fue una marcha multitudinaria, convocaron los mismos de siempre más algunos intendentes«, señalaron.
De todos modos, en Casa Rosada deciden no hablar mucho del tema porque consideran que si se manifiestan explícitamente sobre la condena, es darle lugar al kirchnerismo a una réplica y eso los pondría de nuevo en el plano electoral al polarizar con el Gobierno. Así, los libertarios no quieren dejar cabos sueltos y le quitan importancia al tema y a la repercusión que generó en la sociedad, la cual aseguran que con el correr de los días bajará.
Más críticas del Gobierno
Una de las dirigentes que alzó la voz en nombre de LLA fue Patricia Bullrich, quien apuntó directamente contra la expresidenta: «Cristina Fernández de Kirchner siente que han perdido la capacidad de liderazgo político sumado al hecho de que el kirchnerismo viene en un franca decadencia. Intenta ponerse en el centro de la escena, pero todo lo que puede movilizar el kirchnerismo estuvo ayer«.
«El día de ayer tuvo una clara instrucción de parte de CFK de hacer una movilización tranquila, inclusive lo dijo en el discurso ‘democracia sin violencia’, en una suerte de victimización de su situación. Ese es el tope de gama de lo que pueden lograr que es bastante, bastante escaso desde la perspectiva de una elección en la que votan millones y millones de personas. En el momento de máxima cantidad de gente hubo 48.000 personas, hasta contamos la gente que estaba en su casa, no nos quedamos cortos«, aseguró.
