El Gobierno nacional envió al Congreso un proyecto de ley que apunta a facilitar el uso de dólares no declarados sin consecuencias fiscales para quienes los movilicen. Pero la iniciativa, que lleva el nombre de “Ley de Principio de Inocencia Fiscal”, deja en evidencia una clara exclusión: los monotributistas de mayores ingresos quedarían afuera, a menos que abandonen el régimen simplificado. Así lo explica Eliseo Devoto, abogado y consultor del estudio Lisicki, Litvin & Asociados.
Aunque la propuesta se presenta como un incentivo para quienes tienen capacidad de consumo, solo beneficia a quienes tributan bajo el régimen general, dejando en segundo plano a miles de contribuyentes que hoy están registrados como monotributistas.
Qué propone el proyecto del oficialismo
Entre las medidas clave que propone la ley, se destacan:
- Reforma del Régimen Penal Tributario: eleva los montos para configurar delitos, evita denuncias automáticas y habilita el cierre de causas pagando la deuda y una multa.
- Aumento de multas para infracciones detectadas por ARCA.
- Prescripción reducida a tres años si las declaraciones se presentan en término.
- Nuevo régimen simplificado del Impuesto a las Ganancias, destinado a quienes abandonen el Monotributo y tributen como autónomos bajo un esquema más amplio.
Este último punto es el más relevante: los contribuyentes que se pasen al régimen general podrían declarar ingresos y gastos sin necesidad de justificar el origen de su patrimonio ni sus consumos. Si ARCA no objeta, se les otorgaría un “tapón fiscal”, es decir, quedarían blanqueados de forma automática.
¿Qué ocurre con los monotributistas?
Según los detalles del proyecto, los monotributistas no accederían a este beneficio de forma directa. Para hacerlo, deberían abandonar su categoría y pasarse al régimen general. Eso implica comenzar a tributar Ganancias, IVA y Autónomos, lo que conlleva mayores cargas fiscales y mayor complejidad administrativa.
Si un monotributista utiliza dólares no declarados sin haber hecho el cambio de régimen, corre el riesgo de ser excluido de oficio por ARCA. Esto puede ocurrir si registra gastos, inversiones o consumos que no se condicen con sus ingresos declarados. En ese caso, debería afrontar retroactivamente las cargas del régimen general desde el momento en que hizo el gasto observado.
En palabras simples, el proyecto busca tentar a los contribuyentes de mayor capacidad económica a salir del Monotributo, aunque eso contradiga el discurso de simplificación impositiva que también impulsa el Ejecutivo.
¿Existe una salida para quienes quieren regularizar sin dejar el Monotributo?
Por el momento, no. Desde el Gobierno admiten que no se trata de una omisión sino de una decisión deliberada: el objetivo es que quienes tienen capacidad económica realicen el salto fiscal y dejen de tributar bajo el Monotributo.
Sin embargo, expertos en derecho tributario advierten que esta lógica contradice la meta de fomentar la formalización y la simplicidad del sistema. Una posible solución sería permitir que los monotributistas puedan adherir de forma optativa, sin riesgo de exclusión automática, o al menos que se suspenda temporalmente esa sanción mientras dure la transición.
La propuesta, por ahora, beneficia solo a quienes puedan asumir los costos de ingresar al régimen general. Para los demás, persiste el dilema: mantener el bajo costo del Monotributo o arriesgarse a perderlo por usar los ahorros que nunca se declararon.
