El Ministerio de Salud repudió de forma categórica el paro nacional de ATE que afectará al sector de salud desde la medianoche. La medida fue impulsada por los trabajadores estatales del Hospital Garrahan, a pesar de la conciliación obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo. Desde la cartera sanitaria calificaron la huelga como una “extorsión política disfrazada de reclamo” que pone en riesgo el acceso a la atención médica para millones de argentinos.
La decisión de ATE fue rechazada con dureza por las autoridades. A través de un comunicado oficial, el Ministerio denunció que los hospitales nacionales se están transformando en “campos de batalla gremial” y que este tipo de medidas vulneran derechos fundamentales.
ATE endureció su postura tras el fracaso de la negociación
El gremio respondió con críticas al Gobierno, tras considerar como un “fracaso estrepitoso” la reunión mantenida en la Secretaría de Trabajo. Según ATE, sólo asistieron “funcionarios de segunda categoría”, lo que, a su entender, demuestra el desinterés oficial en resolver el conflicto. Por esa razón, desde el primer minuto del jueves, se llevará adelante un paro nacional en el sector salud.
Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE, acusó al Gobierno de querer “convertir la salud en un negocio” y advirtió que el acceso a la atención médica no puede depender del poder adquisitivo de cada persona. En sus redes sociales, reafirmó que la lucha continuará hasta que se logren respuestas concretas.
Desde el Ministerio, en cambio, se defendieron diciendo que se avanza en un proceso de ordenamiento que prioriza la eficiencia y el cuidado de los pacientes. Señalaron que los recursos recuperados de gestiones anteriores fueron redirigidos al personal, los insumos y el equipamiento hospitalario.
Reclamos por salarios y conflicto en el Hospital Garrahan
El conflicto gremial tiene como epicentro el Hospital Garrahan, uno de los más importantes del país. Entre las demandas centrales, ATE exige un aumento del 100% para compensar el deterioro salarial causado por la inflación. Norma Lezana, de la Asociación de Profesionales y Técnicos del hospital, denunció presiones hacia los residentes, incluyendo amenazas de despido.
En medio de la escalada, la Asamblea de Médicos Residentes decidió levantar la medida de fuerza y volver a sus tareas. Así lo informaron desde el Ministerio de Salud, tras la publicación de un comunicado en el que los residentes explicaron que se vieron obligados a “reincorporarse de manera inmediata”.
Mientras tanto, el Gobierno de Javier Milei sostiene su postura: el funcionamiento de los hospitales no debe verse afectado por conflictos gremiales. ATE, por su parte, insiste en que continuará con el paro nacional en salud hasta que obtengan respuestas reales a sus reclamos.