Esta importantísima denominación de origen se produce en los municipios de Beines, Chablis, La Chapelle-Vaupelteigne, Chichée, Courgis, Fleys, Fontenay-Près-Chablis, Fyé, Maligny, Milly y Poinchy. En la actualidad, más de 40 climas pueden asociarse con la etiqueta Chablis Premier Cru, incluyendo 17 Climats principales de bandera.
Tamaña variedad en lo que respecta a los Climats aportan su propio carácter al vino resultante, dependiendo del suelo y la presentación; todos presentan una sólida estructura y resultan largos en boca. Desde los más minerales, cerrados en su juventud, hasta los más florales, que desarrollan aromas delicados y sutiles, los Climat de Chablis Premier Cru cautivan el paladar. Tras su pálido color dorado, la nariz no expresa todo su potencial al instante y requiere un poco de aireación. Este vino resulta particularmente adecuado para envejecer de cinco a diez años.
En cuanto al terroir de Chablis, el lecho rocoso principal data del período Jurásico, o más precisamente del Kimmeridgeense (hace 150 millones de años). Una particularidad de Chablis Premier Cru es que los climas se extienden entre las orillas derecha e izquierda del río Serein, un afluente del Yonne que atraviesa la región de sur a norte.
Chablis Grand Cru
La denominación Chablis Grand Cru comprende un total de siete Climats: Blanchot, Bougros, Les Clos, Grenouilles, Preuses, Valmur y Vaudésir. Se produce principalmente en el pueblo de Chablis, pero también en Fyé y Poinchy. De color dorado verdoso cristalino, con la edad su noble tonalidad evoluciona a un amarillo claro. Este vino se guarda de diez a 15 años, e incluso a veces más. En nariz, los aromas minerales a pedernal son intensos. Sin embargo, dan paso a tilo, nueces, un toque de miel y almendra. El aroma a seta Fairy Ring o mousseron es un toque característico. En boca, el equilibrio entre vivacidad y cuerpo es perfecto, encapsulando el encanto de un vino inimitable y auténtico. La joya de la corona de Chablis, es un vino rico en matices que se expresa en cada clima.
Los terroirs, formados en el Jurásico Superior, hace 150 millones de años, están compuestos de caliza y marga con Exogyra virgula, diminutos fósiles de ostras. Chablis Grand Cru es uno de los pocos vinos franceses con denominación de origen que hace referencia a su geología, en particular al Kimmeridgeense. Chablis Grand Cru se encuentra en la comuna de Chablis, en la margen derecha del Serein, el pequeño río que atraviesa la región al noreste del pueblo, a una altitud de entre cien y 250 metros. Con una excelente ubicación soleada, la denominación Chablis Grand Cru resulta única. Se distribuye en siete Climats, cuyos nombres figuran en las etiquetas, cada uno con un carácter distintivo, como demuestra el Chardonnay en sus maravillosas variantes: Blanchot, Bougros, Les Clos, Grenouilles, Preuses, Valmur y Vaudésir.
Los Climats de Chablis
En Chablis, las viñas se clasifican en cuatro niveles de denominación: Petit Chablis, Chablis, Chablis Premier Cru y Chablis Grand Cru. Estas dos últimas categorías comprenden vinos de diferentes parcelas identificadas y nombradas, o Climats. Un Climat es una zona que, por sus características físicas y climáticas, es especialmente ventajosa para la viticultura. Estas parcelas, identificadas a lo largo de siglos, dan lugar a una infinita diversidad de vinos. La región vinícola de Chablis comprende 47 Climats que pueden identificarse en la etiqueta del vino.
La palabra Climat es un término típicamente borgoñón. Proviene del griego klima y del latín clima, climatis, que significa «ladera». Cada Climat de la región vinícola de Borgoña es una parcela de viñas cuidadosamente delimitada y bautizada durante siglos, con su propia historia y condiciones geológicas y climáticas particulares. Moldeadas por los viticultores, estas parcelas, que favorecen las grandes variedades de vid, como el Pinot Noir para los vinos tintos y el Chardonnay para los blancos, conforman un mosaico excepcional de denominaciones de origen con rangos que gozan de prestigio mundial, incluyendo las denominaciones Régionale, Village, Premier Cru y Grand Cru.
Los Climat son la fuente de las cualidades organolépticas únicas de los vinos de Borgoña, como su aspecto, aromas, sabor y textura en boca. Algunos Climat gozan de prestigio desde el siglo VII, como el Clos de Bèze en Gevrey. Hasta la fecha, la primera mención del término «Climat» en la región vinícola de Chablis data de 1537 y se refiere a las viñas pertenecientes a la Abadía de Pontigny. En 1935, el Instituto Nacional de Origen y Calidad (INAO) oficializó el uso del término «Climat» y, desde entonces, lo ha utilizado para referirse a todas las denominaciones de origen de Borgoña.
