Máximo Kirchner y Sergio Massa acordaron acelerar el diseño del frente electoral que competirá en las elecciones bonaerenses y nacionales, mientras la tensión interna crece con Axel Kicillof y su Movimiento Derecho al Futuro (MDF).
Ambos dirigentes ordenaron a sus representantes partidarios avanzar en el armado legal del espacio, que podría llevar el nombre de “Peronismo”, y convocar a las fuerzas menores para definir las candidaturas con una única junta electoral.
Una mesa política con nombre y lapicera
Los referentes elegidos por Kirchner y Massa, Facundo Tignanelli y Rubén Eslaiman, trabajarán junto a los apoderados del PJ bonaerense y el Frente Renovador. El objetivo inmediato es conformar el frente electoral en la Provincia de Buenos Aires, con estructura jurídica común para las fechas clave: el 7 de septiembre a nivel provincial y el 26 de octubre en el plano nacional.
En ese marco, el MDF de Kicillof —presentado formalmente como línea interna— reclamó un lugar en la mesa de decisiones. Sin embargo, fuentes partidarias remarcaron que no se trata de un partido independiente, sino de un espacio más, como La Cámpora o el Movimiento Evita. Aun así, será parte de las negociaciones.
La interna se amplía: Kicillof, Grabois y Sabbatella quieren jugar
El próximo martes, se reunirán en la sede del PJ en Matheu representantes de espacios como Patria Grande (Juan Grabois), Nuevo Encuentro (Martín Sabbatella) y el Partido Solidario (Carlos Heller). La intención es acordar una estrategia común y fijar quién tendrá la “lapicera” para definir las listas.
Desde el entorno de Kirchner buscan unificar los criterios para evitar una interna dividida, mientras que el Frente Renovador impulsa una propuesta amplia que incluya a todos los sectores peronistas, pero sin perder el foco: disputar poder y presentar una opción real ante Javier Milei.
Cristina condenada: el peronismo reacciona y se reordena
La condena judicial y prisión domiciliaria a Cristina Kirchner en la causa Vialidad fue el detonante de este reordenamiento. Desde el Frente Renovador interpretan que el masivo acto del 18 de junio en Plaza de Mayo mostró una base movilizada, pero sin conducción clara, lo que obliga a la dirigencia a definir el rumbo con rapidez.
“El intento de proscripción aceleró el reloj interno del peronismo”, dijeron desde el kirchnerismo. Pero la prioridad, advierten en el massismo, no debe ser solo la resistencia. “Se necesita una alternativa que apunte a ganar y gobernar”, señalan.
La estrategia electoral: evitar fragmentaciones y construir unidad real
A diferencia de otras campañas, la decisión será tomada en bloque: habrá una sola Junta Electoral, encargada de validar las listas para ambas elecciones. La estrategia busca blindar el proceso y evitar negociaciones paralelas que debiliten la coalición.
Desde el massismo, consideran clave integrar a todos los actores del panperonismo, desde Kicillof hasta Grabois y Moreno, para dar una imagen de unidad. Al mismo tiempo, deslizan críticas al gobernador bonaerense por su insistencia en construir un espacio propio que podría restar más de lo que suma.
Una propuesta ante Milei que aún busca forma
En lo discursivo, Massa promueve una propuesta de centro que fomente la producción, el trabajo y la industria. El Frente Renovador insiste en que el liderazgo del espacio debe ser colectivo, sin personalismos, pero con decisiones firmes. Kirchner, por su parte, busca sostener la conducción dentro del PJ bonaerense, aunque aún sin definir si será candidato.
La hoja de ruta está en marcha. Lo que resta por definir es quién pondrá el nombre y quién firmará las candidaturas. En medio de la crisis económica y la incertidumbre judicial, el peronismo apuesta a rearmarse, pero todavía enfrenta una pregunta sin resolver: ¿Quién conducirá el nuevo frente opositor?