El miércoles 18 de junio se desarrolló una manifestación en rechazo al fallo de la Corte Suprema de Justicia que confirmó la condena a Cristina Fernández de Kirchner. En ese contexto, una periodista de TN, Paula Bernini, fue atacada verbalmente por un grupo de manifestantes mientras realizaba una cobertura en vivo desde las inmediaciones de Plaza de Mayo.
Durante su labor periodística, la cronista fue rodeada por varias personas que comenzaron a insultarla y exigir que se retirara. En medio del caos, se escuchaban gritos como: «que se vayan, que se vayan». Bernini, en un intento de calmar los ánimos, preguntó con tranquilidad por qué motivo debían irse del lugar. Sin embargo, uno de los presentes respondió de forma agresiva: «Son todos pu… no tienen que estar acá, vos hablás pelotu… en la tele, vos hablás pelotu… en la tele», repitió con enojo.
La situación se tornó más tensa cuando otra voz entre la multitud acusó directamente a los medios: «Todos funcionales a la derecha, ustedes nos trajeron esta mier…». En ese clima de creciente tensión y al no poder continuar con la cobertura en condiciones seguras, la periodista de TN tomó la decisión de interrumpir el móvil en vivo y abandonar el lugar.
El episodio pone en evidencia lo que puede ocurrir durante coberturas en movilizaciones de alto contenido político. La situación de Paula Bernini reaviva el debate sobre la función de los medios tradicionales de comunicación.
