Fuertísimo fue lo que se vivió en Intrusos, el programa que llevan adelante Adrián Pallares y Rodrigo Lussich a través de la pantalla de América TV. Fue allí donde se escuchó parte de la demanda de Mauro Icardi a Wanda Nara, tras pedir la restitución internacional de sus hijas a Turquía.
«Él dice que Wanda secuestró a sus hijas. Dice que las trajo de vacaciones y se quedó a vivir acá», comenzó diciendo el conductor, quien inmediatamente se dispuso a leer el contenido de este documento que dejó a todos con la boca abiera y sin poder creerlo.
«Podemos afirmar conforme a los hechos fácticos accedidos y hechos indiscutibles, la realidad que las niñas vivieron. En Milán, Italia, estuvieron cuando su padre jugaba en el Inter. Luego, fueron a París, Francia, porque su padre jugó en el PSG. Después fue cedido al Galatasaray. Vivían en Turquía porque su padre juega ahí con contrato vigente hasta el 2026, siendo el máximo goleador de la liga de Turquía», afirmaron en la demanda.
«Ahí viene un detalle que arroja un dato muy contundente. Esto de los días que Wanda estuvo sin sus hijas», comentó Rodrigo Lussich. «Él quiere la restitución internacional de sus hijas. Hay que ver cuál es la estrategia legal de Wanda que se la ve quebrada, está triste. Ella siempre supo y él también se lo manifestó, que sus hijas volvieran a Turquía», afirmó Adrián Pallares.
«Ella hizo todo para tratar de evitarlo, hay que ver ahora qué pasa», añadió. «Él dice que fue engañado en su buena fe. ‘La permanencia de las hijas en la Argentina nunca fue consentida por el demandante, fue engañado en su buena fe. Lo que serían unas vacaciones en Buenos Aires se convirtieron en una sustracción de menores, en un secuestro, en un robo de sus propias hijas'», comentó Rodrigo Lussich.
«Le dijo ‘me voy de vacaciones a Buenos Aires’ y se quedó a vivir. Un secuestro de las niñas», afirmó el presentador delante de sus compañeros. «Wanda tendría que haber estado un año acá para tener más derechos. Un dato que no es menor es que él siguió pagando las cuotas del colegio», sentenció Pablo Layus.