Estados Unidos volvió a ser escenario de un crimen político estremecedor. La madrugada del sábado, dos legisladores del Partido Demócrata fueron atacados a balazos en sus hogares ubicados en ciudades vecinas del estado de Minnesota. Melissa Hortman, expresidenta de la Cámara de Representantes estatal, y su esposo fueron asesinados. En tanto, el senador estatal John Hoffman y su esposa se encuentran internados en estado crítico. El agresor, que vestía un uniforme falso de policía, permanece prófugo. Las autoridades calificaron el trágico hecho como violencia política.
Los ataques se produjeron casi en simultáneo, en las ciudades de Champlin y Brooklyn Park, ubicadas al norte de Minneapolis. Según confirmó la Policía, ambos crímenes comparten un mismo patrón: el atacante se hizo pasar por un agente de seguridad para ingresar a las viviendas. La distancia entre ambos domicilios es de apenas 13 kilómetros, lo que alimenta la hipótesis de un atentado planificado y ejecutado con precisión.
Un crimen político con un agresor disfrazado
El gobernador de Minnesota, Tim Walz, no dudó en calificar el hecho como un «asesinato político». En una rueda de prensa matutina, confirmó que se trató de ataques deliberados contra funcionarios electos. «Fue un acto de violencia planificada contra la democracia», declaró el mandatario estatal, quien ordenó la activación del Centro de Operaciones de Emergencia y reforzó la seguridad en toda la zona.
El FBI se sumó a las tareas de investigación en colaboración con la Policía local y estatal. La Asociación de Sheriffs de Minnesota calificó al atacante como “un cobarde disfrazado de protector”, mientras que las autoridades han solicitado colaboración ciudadana para identificar a cualquier persona que se haya hecho pasar por oficial en las últimas horas.
Aunque no se han confirmado detalles sobre la identidad del autor, las agencias de seguridad trabajan con imágenes de cámaras de seguridad y testimonios vecinales para reconstruir los hechos. Ambas escenas del crimen permanecen bajo resguardo mientras se recolectan pruebas y se analiza la secuencia temporal exacta de los ataques, que ocurrieron entre la noche del viernes y la madrugada del sábado.
Quiénes son las víctimas
Hortman era una reconocida dirigente del Partido Demócrata en Minnesota. Presidió la Cámara estatal y era considerada una figura central del progresismo local. Su asesinato ha conmocionado al ámbito legislativo y ha despertado pronunciamientos de líderes demócratas y republicanos por igual.
John Hoffman, senador del distrito 34, tiene una extensa trayectoria en comisiones de salud y políticas sociales. Junto a su esposa, resultó gravemente herido durante el ataque. Aunque el estado de salud de ambos es crítico, fuentes médicas citadas por ABC News indicaron que están siendo estabilizados y se encuentran bajo atención intensiva.
Por el momento, ni el Senado ni la Cámara de Representantes de Minnesota emitieron comunicados oficiales, aunque se espera que en las próximas horas se pronuncien sobre el hecho. La conmoción se extendió rápidamente a nivel nacional.
Trump también condenó el atentado
El presidente Donald Trump utilizó sus redes sociales para repudiar el crimen. “En nuestro país no puede haber espacio para la violencia política. Mis condolencias a las familias de los legisladores atacados. Espero que los responsables sean atrapados y juzgados con todo el peso de la ley”, escribió.
El hecho se da en un contexto de creciente tensión política en Estados Unidos. De acuerdo con datos del Congressional Threat Assessment Center, los ataques y amenazas contra funcionarios públicos han aumentado de forma sostenida desde 2020. La polarización política, sumada al acceso irrestricto a armas de fuego, ha generado una combinación peligrosa que pone en riesgo la integridad de dirigentes en todos los niveles del Estado.
Investigación en curso y alerta institucional
El Departamento de Seguridad Pública de Minnesota, junto a otras agencias como la Policía de Minneapolis y el sheriff del condado de Hennepin, activó un protocolo especial para funcionarios electos. Además, el FBI trabaja sobre la posibilidad de que el atacante tuviera información privilegiada sobre los domicilios de las víctimas y sus rutinas.
Hasta el momento no se registraron otras víctimas ni se detectaron señales de robo o vandalismo. Lo que refuerza la hipótesis de un ataque político puro. Las autoridades aseguraron que seguirán actualizando la información a medida que avance la investigación. Se solicitó a la ciudadanía que se comunique con las fuerzas de seguridad si cuenta con datos sobre individuos que se hayan presentado como agentes en las zonas afectadas.