No hay dudas de que Graciela Alfano es una de las figuras más importantes de la farándula argentina. Aunque ha tenido varios escándalos, algunos de ellos muy fuertes, la diva ha sabido mantenerse en boca de todos. Y es que si hay algo que la representa es su transparencia a la hora de hablar de su vida privada.
En esta oportunidad, y en conversación con el equipo de Puro Show (Canal Trece), Graciela Alfano habló a fondo de su affaire amoroso con Carlos Menem. «En cámara nunca me di besos con él, pero atrás de cámaras sí. ¡Obviamente! Todavía no me vi en la serie y dije ‘menos mal’, pero me podrían haber preguntado. ¡Estoy viva, chicos, vengan y pregunten!», comenzó.
«Obviamente fue un romance muy importante. A mi me enamoró cuando era un caudillo con patillas. Me daba una cosa riojana que venía así con las boleadoras… Un show mío de mi cabeza, viste, total… Después el «señor presidente» y toda esa fomalidad, no sé, a mi me divertía mucho más el otro personaje», continuó Graciela Alfano.
«Él estaba enamorado creo… o por lo menos era lo que sentía y lo que me decía. Yo le respondí muy facilmente, porque en ese momento no me importaba mucho la fidelidad. Yo estaba casada con una persona muy influyente, muy cercano a él, y que además era uno de los hombres más ricos de la Argentina. Y además yo tenía dos hijos, entonces le dice ‘qué hago con vos, yo no te necesito a vos’. Fui clara y él era un tipo que entendía», reveló.
«Lo que les pasó a otras no lo sé. Yo soy la jefa de la manada de las ovejas negras. Me encantaba esa pose de caudillo del interior, era una fantasía mía. Me enamoré de eso, de mi propia fantasía. Habrá durado 6 o 7 meses. No me queaa a dormir con él, y tenía marido e hijos. Me sacaban tarjeta roja. Una cosa es vamos a hacernos los boludos y otra que me quede a dormir. No sé si mi marido se enteró, eso habría que preguntárselo a él», contó.
También recordó un escandaloso episodio: «El jefe de la Side de ese momento, Anzorregui, dijo «¿Sale con la Alfano? Pero la put… madre cómo vamos a hacer para esconder esto». El me proponía cosas y yo se las cancelaba y le pedía otras. Quiero acá y allá. Yo ya tenía mi poder, porque siempre fui una mujer empoderada. Le decía quiero en el helicoptero acá o en el barco e Mario Falak. Yo fui por todos lados. Nos encontrábamos en un barco en el medio del Río de la Plata».
«Había un barco y yo iba en el aire y bajaba… y bueno, me divertía todo eso, esa parafernalia. Esa adrenalina. Cómo llegar, que nadie se entere. Era fabuloso. Y después ya me aburrí. A mi me pasaron algunas cosas con él. Por ejemplo, era una época donde la gente muy conservadora, o muy gorila como se dice, decía «yo me voy del país, esto no puede pasar» y de pronto yo veía que venían esos mismos matrimonios, lo tenían adelante y se genuflexionaban. Era muy fuerte. Yo me aburrí porque las cosas se viven pero también mueren», sentenció Graciela Alfano.
