Connect with us

Hola, qué estás buscando?

POLÍTICA

El proyecto de Wado de Pedro para bloquear la privatización de AySA: «Retroceso en la protección del derecho humano esencial»

El dirigente afirmó que «AySA es salud pública y desarrollo para millones de familias» y que su privatización atenta contra los derechos humanos.

Wado de Pedro

El senador nacional Wado De Pedro presentó este sábado dos proyectos en el Senado con el objetivo de «frenar» la privatización de AySA tras el anuncio del Gobierno. La propuesta del dirigente peronista es «consolidar» el control estatal de la empresa encargada del servicio de agua potable y saneamiento y así evitar que sea vendida a un privado.

Uno de los proyectos declara a AySA como «empresa de interés público y estratégico para el desarrollo humano» y prohíbe expresamente «cualquier intento de privatización, concesión o cesión de su capital accionario», indicaron desde el bloque de UxP en la Cámara Alta en un comunicado. La iniciativa también establece que cualquier «modificación del objeto de la empresa» o «desprendimiento» de activos deberá contar con mayoría agravada de dos tercios en el Congreso.

«El agua es un recurso natural escaso y estratégico, y es un derecho humano del cual dependen la vida, la salud y el desarrollo de nuestro pueblo», sostuvo Wado De Pedro. Y agregó: «AySA no es sólo una empresa: es salud pública y desarrollo para millones de familias».

Por otro lado, el senador presentó un proyecto de declaración que repudia los decretos presidenciales 493 y 494/25, que habilitan la venta de la empresa, y advierte que «constituyen un retroceso en la protección del derecho humano esencial de acceso al agua potable segura y al saneamiento cloacal». El mismo parte de prensa sostiene que, durante su estatización, AySA logró extender el acceso al agua potable a más de 4,5 millones de personas y a la red cloacal a 3,6 millones, con una cobertura actual del 85% en agua y del 70% en saneamiento.

El proceso de privatización

Según fuentes oficiales, el esquema previsto consta de dos grandes etapas. En primer lugar, se lanzará una licitación pública nacional e internacional para seleccionar un operador que obtendrá, mediante contrato de concesión, el 51% de las acciones. Esta etapa, que requiere al menos 60 días desde el llamado, se concretará en el último trimestre del año.

En una segunda fase, el Ejecutivo colocará el 39% de las acciones en el mercado bursátil, mediante una oferta pública inicial. El 10% restante del paquete accionario quedará en manos de los trabajadores de la empresa, como parte del esquema previsto. Si bien no hay una fecha definida para terminar con todo este proceso, se estima que demandará entre ocho y doce meses, por lo que para mediados de 2026 debería haber finalizado estas dos etapas.