En medio de un contexto social cada vez más tenso, la concejal de La Libertad Avanza en Quilmes, Estefanía Albasetti, sacudió el tablero político con una grave denuncia contra la gestión de la intendenta Mayra Mendoza. La dirigente libertaria habló de corrupción estructural, autoritarismo institucionalizado y una crisis social silenciada por propaganda oficial.
“Gastan 8 millones de pesos por día en publicidad, mientras el 44% de los vecinos no tiene gas de red y el 21% vive sin cloacas. Son datos oficiales, no opiniones”, disparó Albasetti en diálogo con Radio Rivadavia.
La edil reveló que muchas de sus propuestas desde el Concejo Deliberante son sistemáticamente bloqueadas por el oficialismo:
“Todo se cajonea. Como no te permiten avanzar con nada, decidí usar las redes sociales para mostrar la verdad que se oculta en las sesiones”.
Uno de los puntos más controvertidos que denunció fue la vigencia de un impuesto del 2% al combustible que, según explicó, es “inconstitucional y perjudica directamente al bolsillo de los vecinos”. Y apuntó directamente a los autores:
“Los concejales que lo votaron son responsables directos. La gente paga más, pero no recibe ningún servicio a cambio”.
Según Albasetti, Mendoza recibió además facultades extraordinarias para subir las tasas municipales sin necesidad de aprobación legislativa:
“Hoy los quilmeños están pagando el triple que hace un año. Y los barrios siguen con luminarias intermitentes, montañas de basura y nula seguridad”.
Pero la situación, según relató, no se limita al plano administrativo. Albasetti denunció un clima de violencia política en el Concejo:
“Las sesiones parecen un circo romano. Te insultan, te amenazan, y la presidenta del bloque oficialista, Eva Mieri, que hoy está detenida, era una de las más violentas”.
La concejal también narró situaciones de hostigamiento personal, como la intimidación sufrida por parte de referentes de comedores barriales. Sin embargo, allí también encontró una señal de apoyo popular:
“Me mandaron a intimidarme, pero al conversar, las mismas mujeres me dijeron: ‘No me saco una foto con vos porque me sacan la comida, pero te prometo que te voto’”.
Sobre Mendoza, fue tajante:
“Está más preocupada por defender a Cristina que por gestionar. Está haciendo campaña del miedo en escuelas y clubes, diciéndole a chicos de 9 años que si piensan distinto los van a meter presos. Es una locura total”.
En caso de que Mendoza pida licencia, su lugar sería ocupado por Eva Mieri, hoy con causas judiciales pendientes. “No sabemos qué es peor”, sentenció.
Pese a todo, Albasetti se mostró esperanzada:
“La gente humilde también se cansó del uso político, la manipulación y la mentira. El cambio está cerca y, en las próximas elecciones, se va a notar”.
La denuncia de Albasetti vuelve a poner el foco sobre la gestión municipal en el Conurbano bonaerense y la tensión creciente entre oficialismo y oposición en distritos clave. El caso de Quilmes, lejos de ser una excepción, puede anticipar el tono de la próxima batalla electoral.