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POLÍTICA

Escándalo por presunto fraude en el Examen Único de Residencias: investigan un video grabado con anteojos espía

El Ministerio de Salud analiza un nuevo indicio que alimenta las sospechas de filtraciones y trampas. Un postulante habría registrado las preguntas con una microcámara y compartido el contenido desde el baño.

Residencias

El presunto fraude en el Examen Único de Residencias Médicas sumó un nuevo elemento de gravedad. Desde el martes por la tarde, el Ministerio de Salud de la Nación se encuentra analizando un video que muestra cómo un postulante habría grabado toda la hoja del examen utilizando una cámara oculta en sus anteojos. Las imágenes, que comenzaron a circular en redes sociales, registran en detalle las 100 preguntas de la prueba tomada el pasado 1 de julio en el predio de Parque Roca.

El contenido del video muestra con nitidez el nombre del aspirante implicado, quien obtuvo 92 puntos sobre 100. Según confirmaron desde la cartera sanitaria que conduce Mario Lugones, se trata de un ciudadano de nacionalidad ecuatoriana, ya identificado, y que deberá presentarse nuevamente a rendir la próxima semana junto con otros 267 postulantes.

Una mecánica de fraude en debate

De acuerdo con fuentes del Ministerio, la principal hipótesis gira en torno a una modalidad de fraude “sofisticada pero efectiva”. El mecanismo habría consistido en filmar la hoja con anteojos espía, salir del aula hacia el baño y, desde allí, enviar el video a un contacto externo encargado de resolver las preguntas. Luego, el postulante regresaba con las respuestas memorizadas o registradas.

«El baño era el momento de contacto con el celular para enviar el examen filmado y recibir las respuestas. Ahí se resolvía todo», remarcaron este miércoles fuentes oficiales al citado medio. Según relataron, llamó especialmente la atención la cantidad de aspirantes que se ausentaron varias veces del aula durante las cuatro horas que duró la evaluación.

268 médicos deberán repetir la prueba

La investigación interna del Ministerio de Salud se aceleró después de la difusión pública del listado de puntajes, que reveló un número inusualmente alto de resultados por encima de los 90 puntos. La denuncia fue elevada por un grupo de aspirantes a través del rectorado de la Universidad de Buenos Aires, quienes advirtieron inconsistencias entre las notas del examen y los promedios académicos históricos de ciertos participantes.

El vocero presidencial, Manuel Adorni, anunció que 268 médicos deberán volver a rendir la evaluación. «Los resultados no se condicen con los antecedentes académicos», sostuvo el funcionario días atrás en su habitual conferencia. Del total de implicados, 149 poseen títulos emitidos por universidades extranjeras, muchas de ellas sin historial destacado en estos concursos.

Universidades bajo sospecha

Según indicaron fuentes de la investigación, parte de las sospechas recaen sobre médicos egresados de la Universidad Técnica de Manabí (UTM), una institución ubicada en la costa de Ecuador. Varios de los mejores puntajes obtenidos este año —incluso entre los primeros treinta del ranking nacional— corresponden a egresados de esa universidad, cuando en años anteriores ni siquiera figuraban entre los primeros quinientos.

“Este video podría explicar —en parte— cómo aparecieron puntajes altísimos en postulantes de universidades que históricamente no figuraban entre los primeros lugares”, reconocieron desde la cartera que ahora también enfrenta cuestionamientos por una posible filtración interna del examen.

Revisión del mérito final y acceso a residencias

El sistema de residencias médicas se basa en el “mérito final”, una combinación entre el resultado del Examen Único y el promedio obtenido durante la carrera. A partir de ese ranking, se distribuyen los cupos en hospitales y especialidades según la posición alcanzada. Las denuncias apuntan a que aspirantes con promedios inferiores a ocho habrían logrado resultados extraordinarios, desplazando a médicos con trayectoria académica sólida.

Por el momento, el Ministerio no aplicó sanciones formales al implicado que grabó el examen, aunque sí confirmaron que está dentro de los 268 que deberán someterse nuevamente a la evaluación. Desde el Gobierno nacional aseguran que se buscará garantizar la transparencia del proceso y que se reforzarán los controles para evitar nuevas maniobras fraudulentas.