El dirigente social y líder de Argentina Humana, Juan Grabois, lanzó una feroz crítica contra el presidente Javier Milei en declaraciones televisivas a América TV, donde no solo cuestionó la ideología libertaria del mandatario, sino que lo vinculó directamente con el caso Libra, una causa judicial que lo tiene en la mira en Estados Unidos.
“Su dios es el dinero, su dios es el mercado, el capital. Lo único que le importa es eso”, disparó Grabois con dureza, en un tono cargado de acusaciones éticas, políticas y religiosas.
El también exprecandidato presidencial fue más allá y describió a Milei como una figura peligrosamente fanatizada:
“Es una especie de yihadista del mercado. No es sano para una república que, entre el esoterismo que practica su hermana y estas visiones fundamentalistas, gobierne alguien así”.
En relación al escándalo por el fondo de inversión Libra Group, que investiga posibles irregularidades vinculadas a la privatización de empresas argentinas y presuntas presiones sobre decisiones judiciales, Grabois fue categórico:
“Con lo de Libra fue evidente. Detrás de todo esto hay codicia, hay una voracidad por el dinero que no tiene límites. Se habla mucho de ideas, pero en el fondo es idolatría del capital”.
El referente social incluso sugirió un acuerdo espurio entre el gobierno argentino y actores judiciales o financieros del exterior:
“Negocia lo de YPF a cambio de la impunidad por el caso Libra. Está muy comprometido en Estados Unidos y busca taparlo entregando el patrimonio nacional”.
Grabois sostuvo que detrás del discurso de libertad y ajuste se esconde una trama de corrupción encubierta, que requiere ser investigada en profundidad por la Justicia, tanto en Argentina como en el extranjero.
Sus declaraciones se dan en un contexto de creciente tensión política, con el Gobierno nacional bajo fuego por la causa Libra, la entrega de acciones en YPF, y los ajustes en áreas sensibles como salud, educación y programas sociales. Grabois, uno de los principales referentes del ala cristiana y combativa del progresismo, advirtió que la sociedad “no puede permanecer indiferente ante esta entrega sistemática del país”.
