En mayo, la actividad económica registró una leve caída del 0,1% respecto a abril, de acuerdo con los datos difundidos por el INDEC. La comparación mensual mostró un freno en la recuperación, aunque el indicador marcó un crecimiento del 5% interanual, impulsado por varios sectores que venían golpeados.
Este aumento en términos anuales está directamente relacionado con la baja base de comparación. En mayo del año pasado, la economía había sufrido una fuerte contracción tras la devaluación implementada por el gobierno de Javier Milei, que generó un fuerte impacto en los niveles de actividad durante los primeros meses de gestión.
Comercio, finanzas e industria impulsaron el crecimiento
El Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) mostró que trece de los sectores relevados tuvieron mejoras frente al mismo mes de 2024. La intermediación financiera encabezó los avances con un salto del 25,8%, seguida por el sector pesquero, que creció un 12,2%.
El rubro de comercio mayorista, minorista y reparaciones fue el de mayor incidencia positiva en el índice, con una suba del 10%. También repuntó la industria manufacturera, que logró un crecimiento interanual del 5%, aportando al repunte general.

Bajas puntuales en energía y administración pública
A pesar del resultado general positivo, hubo sectores que siguieron en retroceso. El área de electricidad, gas y agua mostró una baja del 9% en comparación interanual. También cayó la administración pública y defensa, con una merma del 0,9%.
Ambos rubros restaron en conjunto 0,20 puntos al crecimiento del EMAE. No obstante, su peso relativo no alcanzó para frenar el avance de los sectores que sí mostraron recuperación.
En términos mensuales, según el INDEC, el retroceso del 0,1% muestra que aún hay dificultades en la reactivación. Aunque algunos sectores se reacomodan, otros permanecen estancados. Economistas señalan que la caída del consumo, la cautela empresarial y la falta de inversión continúan afectando el dinamismo de la economía.
La mejora del 5% interanual en la actividad económica representa un dato alentador, pero con matices. El repunte parte de un piso muy bajo, lo que exige cautela a la hora de proyectar una recuperación sostenida. Por ahora, el rebote parece más técnico que estructural, y dependerá del contexto macroeconómico y de las políticas que se apliquen en lo que resta del año.