En una entrevista con Infobae En Vivo, el intendente de General Pueyrredón y actual candidato a senador bonaerense por la 5° sección electoral, Guillermo Montenegro, lanzó duras definiciones sobre la interna del oficialismo y dejó en claro su respaldo absoluto al presidente Javier Milei.
Consultado sobre la creciente tensión entre Milei y la vicepresidenta Victoria Villarruel, Montenegro fue categórico:
“Ya no está en la toma de decisiones por una decisión personal de ella, de abandonar las ideas que marcaba el Presidente como importantes. Si hay uno del equipo que no responde, gracias, no sos más parte del equipo”.
El intendente de Mar del Plata remarcó que en un sistema presidencialista, la conducción está claramente definida:
“El presidente es el que manda, no hay ninguna duda. Cuando dice ‘vamos para acá’, lo dice pensando en la Argentina. Si alguien del equipo no está dentro del esquema, se tiene que ir. Está claro”.
Apoyo sin condiciones a Milei y dardos al pasado kirchnerista
Montenegro también se refirió al rol del PRO dentro de la alianza con La Libertad Avanza de cara a las elecciones legislativas bonaerenses del próximo 7 de septiembre, donde se renovarán senadores y diputados provinciales.
Sin rodeos, expresó que la lealtad política no puede estar basada en camisetas partidarias sino en convicciones compartidas:
“No tenés que acompañar porque sos del PRO, tenés que acompañar porque es lo que corresponde. Porque el otro camino nos hizo mierda. Tenés que ir, porque estamos acá y en este proceso porque hicieron mierda a la Argentina”.
Un mensaje para adentro y para afuera
Con su tono frontal, Montenegro se alineó con el discurso más duro del oficialismo y envió un mensaje tanto hacia la interna del Gobierno como hacia el electorado: el que no respalda el rumbo libertario, se queda afuera.
A menos de dos meses de las elecciones provinciales, el intendente marplatense busca consolidar su perfil como una figura de orden y liderazgo, que respalda la línea dura de Milei, Karina y Caputo, y que promete representar ese espíritu en el Senado bonaerense.